La crisis de las grandes ‘telecos’ fuerza las primeras salidas de consejeros delegados
Vodafone, Orange, Telecom Italia y Swisscom han renovado sus cúpulas este año
Las grandes telecos europeas viven una época de fuertes sacudidas por la dura competencia y la presión sobre los resultados. Una situación que ha contribuido a acelerar los cambios en las cúpulas de las operadoras. Vodafone ha sido la última, pero, desde principios de año, Orange, Telecom Italia o Swisscom han llevado a cabo cambios de sus principales directivos.
Vodafone, comunicó la salida de Nick Read, CEO desde hace cuatro años, y su sustitución, de forma interina, por la directora financiera, Margherita Della Valle, hasta la elección de un nuevo máximo responsable. Read se ha visto penalizado por los malos resultados, culminados por un nuevo recorte de previsiones para este año, con el consiguiente hundimiento en Bolsa. Durante el mandado de Read, que anteriormente fue director financiero de Vodafone, las acciones se han dejado un 40% del valor.
Uno de los primeros retos de la nueva CEO será tratar de convencer a las autoridades de la competencia de Reino Unido para que aprueben la fusión de las divisiones británicas de Vodafone y Hutchison. Además, Vodafone se enfrenta ahora a la culminación de la venta de sus torres a KKR y GIP; la fuerte competencia en países como España e Italia; la posible venta de la red fija en España; la recuperación del negocio en Alemania, su principal mercado; y la posible revisión de la política de dividendos.
A principios de año, Telecom Italia, envuelta en una opa de KKR, nombró nuevo CEO a Pietro Labriola, hasta entonces su máximo responsable en Brasil, en sustitución de Luigi Gubitosi. Labriola, que contaba con el apoyo de Vivendi, primer accionista de Telecom Italia, con un 24% del capital, planteó una estrategia para rechazar la opa de KKR y maximizar el valor de los activos de la compañía.
Entre sus planes figura la fusión de la red fija de Telecom Italia con la de su rival Open Fiber, controlada por la entidad pública CDP. Sin embargo, los planes no terminan de fraguarse, especialmente tras el cambio político en Italia, cuyo nuevo Gobierno, liderado por Giorgia Meloni, quiere esperar.
Las acciones de Telecom Italia cotizan en 0,21 euros, con una caída anual del 54%. En su opa, KKR ofrecía 0,505 euros por título, valorándose la teleco en 10.800 millones de euros, muy por encima de su actual capitalización de 4.300 millones.
En la ola de cambios también entró otro grupo con gran presencia en España, Orange. En abril, Christel Heydemann se convirtió en la CEO del grupo, en sustitución de Stephane Richard, quien había presentado su dimisión tras ser condenado en el “caso Tapie”. Richard, que llevaba más de 10 años en el cargo, también dejó el cargo de presidente del consejo de administración.
Orange
Heydemann, responsable en Francia de Schneider Electric, y consejera de Orange durante cinco años, pasaba a ser la primera mujer en dirigir el antiguo incumbente francés, y en la primera en liderar una gran operadora europea. La directiva llegó al cargo en un momento de fuerte competencia en sus mercados principales de Francia y España.
En este último país, Heydemann debe culminar el proceso de fusión entre Orange y MásMóvil, valorada en más de 18.000 millones de euros, para dar lugar a un operador líder en clientes de telefonía móvil y banda ancha. La ejecutiva tiene un duro trabajo por delante porque la fusión va a ser revisada en profundidad por las autoridades de competencia y no se cerrará hasta el segundo semestre de 2023.
A su vez, Swisscom nombró nuevo CEO a Christoph Aeschlimann, su máximo responsable de redes, tras la dimisión, tras casi una década en el cargo, de Urs Schaeppi. El directivo, que asumió el puesto en junio, tiene su principal reto en los despliegues de fibra en el país. Hace pocos días, un tribunal suizo dio la razón a las autoridades de la competencia del país en un litigio frente a la propia Swisscom. Los reguladores establecieron medidas cautelares en 2020, y ahora la justicia les ha dado la razón.