Los países de la UE debatirán la nueva propuesta de tope del precio del gas de 220 euros
La propuesta supone rebajar los 275 euros Mw/h planteado en noviembre y que tuvo un fuerte rechazo
Los países de la Unión Europea estudian la última propuesta planteada para rebajar el tope del precio del gas a 220 euros Mw/h, frente al anterior de 275 euros Mw/h que planteó en noviembre Bruselas y que no se aplicaría nunca, dadas las condiciones adicionales que había planteado la Comisión y que nunca se han cumplido. Por ello, los veintisiete rechazaron frontalmente el planteamiento de Bruselas y ahora se busca un nuevo acuerdo, a una semana de una reunión en la que el bloque espera resolver una cuestión que ha dividido profundamente a los 27 Estados miembros.
Un grupo de países, entre ellos Alemania, se ha opuesto a la idea de cualquier tope, alegando que podría dificultar la seguridad de los suministros, mientras que Bélgica, Italia y Polonia lo ven como una forma de proteger a los consumidores y las economías del impacto de los altos precios de la energía. Bruselas busca un planteamiento que no suponga una intervención de precios de forma "artificialmente baja", como temen Alemania y Países Bajos, grandes opositores a la norma.
Según la propuesta presentada a última hora del lunes por la República Checa, que ostenta la presidencia de turno de la UE, el tope se aplicaría si los precios superasen los 220 euros por megavatio hora durante cinco días en el contrato del primer mes en el centro de gas holandés Title Transfer Facility (TTF), según una propuesta vista por Reuters y por Bloomberg. El precio TTF, que sirve de referencia europea, también tendría que estar 35 euros por encima del precio del gas natural licuado (GNL), para que se activara el límite.
El nuevo compromiso checo está por debajo del tope de 275 eur/MWh en diez jornadas consecutivas (frente a los cinco de la propuesta checa) propuesto por la Comisión Europea el pasado 22 de noviembre y que no ha convencido a los gobiernos. Entonces se planteó como condición adicional para aplicarse el tope que el precio del gas mostrara una divergencia de más de 58 euros respecto a los precios internacionales de referencia del gas natural licuado (GNL) (ahora se rebaja la diferencia a 35 euros) .
El acuerdo sobre un tope de precios del gas es clave para desbloquear la adopción de un paquete más amplio de medidas de emergencia, incluido el fortalecimiento de las compras conjuntas y los límites a la volatilidad intradía. Si bien los ministros acordaron la forma del paquete el mes pasado, su aprobación final quedó en suspenso para permitir más conversaciones sobre cómo limitar los precios del gas.
La UE "perdió una gran oportunidad" de actuar sobre el tope del precio del gas, dijo el primer ministro esloveno, Robert Golob, a los periodistas en una reunión de los líderes del bloque en Tirana, Albania. Pero otros países continúan advirtiendo que un tope demasiado ajustado podría poner en peligro el suministro de gas. “Ya he dicho que no podemos tener un tope que sea demasiado bajo; de lo contrario, no podemos tener suministros”, dijo el presidente francés Emmanuel Macron a los periodistas en Tirana. “Debe haber un límite y un mecanismo para evitar picos. Eso es lo que hemos decidido como europeos", añadió.
La semana pasada, un grupo de siete países de la UE pidió un límite más estricto en los precios del gas, argumentando que la versión de la Comisión nunca se activaría porque hay demasiadas condiciones estrictas adjuntas.
Los Estados miembros descontentos con la propuesta de la UE también han presentado sus propias propuestas. Los Países Bajos quieren limitar el precio a la compra de gas con apoyo público y argumentan que un "mecanismo de control de precios" más amplio podría distorsionar los mercados y dañar el suministro. Bélgica y Polonia proponen por su parte un tope fluctuante.
Algunos diplomáticos de la UE han asegurado a Reuters que las posturas de los países europeos no han variado y que será difícil alcanzar un acuerdo sobre el polémico tema en la reunión de los ministros de Energía el próximo 13 de diciembre. Las discusiones podrían desembocar en una cumbre de líderes de la UE el 19 de diciembre.
La Comisión Europea se había mostrado reacia a proponer un tope de precios, algo que que algunos países de la UE llevan meses exigiendo, y muchos criticaron su propuesta, con condiciones tan estrictas que es poco probable que se aplique.
Los precios del gas se dispararon este año tras la invasión de Ucrania en febrero por parte de Rusia, principal exportador de gas. En agosto se alcanzaron máximos históricos, cuando los países europeos hacía acopio de cara al invierno.
El precio del TTF rondaba los 134 euros el martes, por debajo del máximo de 340 euros alcanzado en agosto.