Ventajas fiscales a las que pueden acceder los autónomos que hacen viajes de negocios
Las dietas o el transporte están exentos de tributación
Los autónomos que realizan viajes de negocios pueden acceder a una serie de ventajas fiscales. Para ello es importante diferenciar entre el complemento por destino y la exención por trabajo desarrollado en el extranjero.
Expertos de Arrabe Integra explican que las dietas no tienen ningún tipo de gravamen. Las dietas son aquellos gastos adicionales que se producen cuando un empleado debe trabajar fuera de su centro de trabajo habitual. Así, en España no tendrán coste de tributación el coste que esté justificado de gastos de transporte o bien el 0,19 euros el kilómetro cuando se emplea el vehículo privado.
Los gastos de estancia tampoco tendrán tributación, así como los gastos que sean de manutención hasta los 48,08euros, aunque si el desplazamiento es al extranjero el coste se incrementa hasta los 91,35 euros. Sin embargo, estas dietas no podrán aplicarse durante 9 meses de continuo.
También estarán exentos de tributación aquellas cantidades que perciban los empleados de empresas con destino en el extranjero y que, además, son consideras un exceso sobre el salario habitual. Es importante recordar que hay destino cuando el trabajador realiza un cambio en el centro de trabajo y este pasa al extranjero.
Trabajo en el extranjero
Además de eso, existen exenciones por el trabajo que se desarrolla en el extranjero. En este caso, la exención es incompatible con el complemento de destino que se perciba. Esto quiere decir que no se podrán aplicar dos exenciones durante el mismo ejercicio fiscal. Asimismo, esta exención permite dejar fuera de tributación, hasta un máximo de 60.100 euros anuales. Dicho importe, en concepto de salario y otras retribuciones derivadas del trabajo, puede ser habitual o adicional.
Aun así, el trabajador debe cumplir con que el trabajo se desarrolle en el extranjero y que la entidad beneficiaria sea no residente. Además, se tendrá en cuenta el hecho de que el país donde se realicen los servicios no sea un paraíso fiscal y tenga en vigor un impuesto análogo al español.
Si se trata de trabajadores con movilidad internacional, es importante valorar la opción más beneficiosa para ellos.