Los precios hoteleros se dispararon un 13% en agosto
Las pernoctaciones rozaron los niveles previos a la pandemia
Los precios de consumo en agosto escalaron un 10,5% en tasa anual. La inflación subyacente, que mide la evolución de los elementos menos volátiles tras descartar energía o alimentos, subió un 6,5%, con los hoteles como uno de los elementos que más empujo al alza los precios. La encuesta de ocupación hotelera hecha pública esta mañana por el INE confirma que las tarifas que cobraron los establecimientos hoteleros subieron un 13,3% anual, situándose en máximos de la serie histórica para ese mes.
El incremento de precios fue generalizado, aunque especialmente llamativo en Cataluña, con un alza del 21,6%, y en Madrid, del 20,1%. En otras cinco autonomías (Baleares, Comunidad Valenciana, Murcia, Navarra y País Vasco), el aumento de tarifas superó el 10%. En el otro lado, Castilla-La Mancha fue la única autonomía en la que los precios bajaron. Por categorías, todas registraron alzas de dos dígitos.
La explicación a ese subidón de precios se encuentra en el alza de las pernoctaciones, que rozaron los niveles precrisis, tanto para los viajeros residentes en España como los extranjeros, por la fuerte demanda de reservas procedente del mercado naciona e internacional.
En agosto de 2022 se produjeron 46,3 millones de estancias hoteleras en España, lo que supuso regresar a los niveles registrados en el mismo mes de 2018 y quedarse a 700.000 pernoctaciones del máximo histórico alcanzado en agosto de 2019, con 47,05 millones. En el análisis por mercados de procedencia, el mercado nacional se comportó de forma diferente a los dos años de pandemia, en los que monopolizó la ocupación hotelera. De esta manera se vio suparada por los viajeros extranjeros, cuando estos tradicionalmente habían aportado dos de cada tres pernoctaciones.
Los residentes en España realizaron 18,2 millones de estancias en agosto de 2022, en linea con lo realizado en agosto de 2019, mientras que los extranjeros hicieron 28,8 millones, recuperando el protagonismo previo a la crisis.