Bonificaciones en 2022 para autónomos con discapacidad
Los profesionales con discapacidad pueden solicitar bonificaciones de las cuotas, para formación o para poner en marcha la empresa.
Los autónomos con discapacidad que ponen en marcha su empresa cuentan con una serie de bonificaciones para hacer realidad su idea de negocio. Estas bonificaciones están en marcha desde la ley de Reforma Urgente del Trabajador Autónomo en 2017.
Entre las bonificaciones destacan las ayudas para que el autónomo con discapacidad inicie la actividad. La cuantía de las ayudas dependerá de la comunidad autónoma y varían de los 5.000 a los 10.000 euros.
Los autónomos con discapacidad dispondrán también de la posibilidad de acceder a la financiación de su negocio a un coste menor. Estos profesionales podrán reducir hasta cuatro puntos el interés fijado en los préstamos.
Igualmente podrán recibir asistencia técnica para desarrollar la actividad. Esta ayuda podrá cubrir hasta el 75% del coste de los servicios prestados con un tope máximo de 2.000 euros.
Bonificaciones de las cuotas
Por último, existen ayudas para que los profesionales sigan formándose. El objetivo de estas ayudas es cubrir hasta el 75% del coste de los cursos con un importe máximo de 3.000 euros.
La Seguridad Social también permite a los autónomos con discapacidad acceder a la tarifa plana durante el primer año del alta. Así, estos profesionales pagarán 62,70 euros durante ese tiempo. Una vez pasen los primeros doce meses, los autónomos con discapacidad podrán beneficiarse de una bonificación de las cuotas del 50% sobre la cuota por contingencias comunes durante un máximo de 48 meses hasta un máximo de 5 años desde la fecha del alta.
Desde AyudaTpymes recuerdan que en el año 2019 entró en vigor la bonificación por discapacidad sobrevenida. De esta manera, si a un autónomo le diagnostican una discapacidad mientras que está dado de alta en el RETA, puede acogerse a una bonificación de la tarifa plana por esta causa. No obstante, deberá tener una discapacidad igual o superior al 33% reconocida por la Seguridad Social y deberá solicitar expresamente esta bonificación a la Seguridad Social.
La entrada en vigor de la ley de Reformas Urgentes del Trabajador Autónomo ha propiciado un aumento en el número de autónomos con discapacidad, que ha crecido en un 7,6% en los últimos años.