Porsche alcanza una valoración máxima de 85.000 millones para su salida a Bolsa
El grupo automovilístico se ha asegurado una demanda de entre 60.000 y 85.000 millones, según Bloomberg
Porsche, la compañía de automóviles deportivos propiedad del grupo Volkswagen, se ha asegurado una demanda de entre 60.000 y 85.000 millones de euros para su futura salida a Bolsa, que se convertiría en una de las más importantes de las llevadas a cabo en Europa, según informa Bloomberg.
Esa demanda excedería las acciones que Porsche ofrecerá al mercado. La compañía tiene previsto anunciar oficialmente sus planes de salir al mercado en la primera semana de septiembre, después de que su comité de supervisión de su visto bueno, siempre que no surjan nuevos obstáculos en el mercado, según las fuentes consultadas por la citada agencia.
Esta también indica que grandes grupos inversores, como T Rowe Price Group, o el fondo de Qatar, ya han mostrado su interés en suscribir acciones en la futura OPV en ese rango de valoración. Multimillonarios como el fundador de Red Bull, Dietrich Mateschitz, o el presidente de LVMH, Bernard Arnault, también participarían en la operación. Se da la circunstancia de que Porsche mantiene negociaciones abiertas con Red Bull para comprar una participación en su escudería de Fórmula 1, con vistas a ser su proveedor de motores a partir de 2026.
La buena demanda que tendrá la salida a Bolsa de Porsche da esperanzas para la reactivación de este tipo de operaciones en Europa. Quienes acudan a la misma, recibirán acciones preferentes de Porsche sin derechos de voto, según detalla Bloomberg. El clan Porsche-Piech recibiría un dividendo especial para poder acudir a la operación y hacerse con una participación de bloqueo. Tal y como se ha informado en los últimos meses, la intención es sacar al mercado un 25% del capital de la marca.
Todo ello después de que el grupo Volkswagen anunciase el nombramiento de Oliver Blume, presidente del consejo de administración de Porsche, para ser el consejero delegado del grupo Volkswaen, sustituyendo a Herbert Diess con efectos a partir del 1 de septiembre, manteniendo su puesto en Porsche. La marca deportiva aporta una cuarta parte de los beneficios del gigante alemán del motor.