Moscú reabre su mercado de bonos a inversores de países amigos
Podrán operar inversores de países que no haya impuesto sanciones a Rusia, como China o Turquía Los bancos de Wall Street están regresando con cautela al mercado ruso, según Reuters
El mercado financiero ruso intenta salir del colapso en que entró a raiz de la invasión de Ucrania hace ya casi seis meses y pretende hacerlo de la mano de los países amigos, aquellos que no han impuesto sanciones a las operaciones con el país. La Bolsa de Moscú ha reabierto este lunes de manera parcial la inversión en el mercado de renta fija, después de haber permanecido cerrado desde finales de febrero, aunque únicamente podrán realizar transacciones los inversores de países no hostiles, además de las personas físicas y jurídicas que actúen en beneficio de entidades rusas.
"La Bolsa de Moscú proporcionará a clientes no residentes de países que no son hostiles, así como a no residentes cuyos beneficiarios finales sean personas físicas o jurídicas rusas, poder realizar transacciones en el mercado de bonos", ha anunciado el gestor del mercado ruso. Es decir, los inversores de China, Turquía o India, que no han impuesto sanciones contra Rusia.
Rusia cerró sus mercados de acciones y bonos después del comienzo de la invasión de Ucrania el pasado 24 de febrero. En el mes de marzo, el mercado moscovita comenzó una reapertura gradual que se limitó a los bonos emitidos por el Gobierno ruso, mientras que el mercado de acciones reabrió a finales de marzo. La apertura parcial de ahora pretende recuperar al inversor extranjero, aunque con todas las limitaciones que impone el bloqueo establecido por las economías occidentales.
El regreso de los bancos de Wall Street
El anuncio de la reapertura parcial del mercado ruso de bonos coincide también con la decisión que habrían tomado varios de los principales bancos de Wall Street de volver a facilitar las operaciones con deuda rusa, según informa la agencia Reuters. Las entidades europeas y estadounidenses habían abandonado el mercado ruso a raíz de las sanciones impuestas por EE UU, que impedían a los inversores estadounidenses la compra de activos financiero de Rusia, lo que incluía el cobro del cupón de las emisiones de deuda.
En julio sin embargo el Tesoro de EE UU permitió a los inversores estadounidenses que deshicieran sus posiciones en activos rusos, ante lo que los principales bancos de Wall Street están permitiendo de forma muy gradual el regreso al mercado de deuda soberana y corporativa rusa. Los bancos que han vuelto a operar en este mercado son, según señala Reuters, JP Morgan, Bank of America, Citigroup, Deutsche Bank, Barclays y Jefferies.
La agencia añade que las entidades están tomando numerosas precauciones para evitar las sanciones y que la operativa se centra no en la toma de nuevas posiciones sino en la rebaja del riesgo a Rusia, y en especial con inversores no estadounidenses.
Al inicio de la invasión rusa de Ucrania, el pasado febrero, en el mercado internacional cotizaban alrededor de 40.000 millones de dólares en bonos soberanos rusos, de los que la mitad estaba en manos de inversores extranjeros. Su valor se derrumbó con el conflicto y Rusia pasó a ser considerada entre los inversores en una suerte de suspensión de pagos técnica, ante el bloqueo en las transacciones establecido por EE UU y la UE. La decisión del Tesoro de EE UU de finales de julio de facilitar el cierre de posiciones en deuda rusa y el abono de las coberturas por los bonos en suspensión de pagos ha permitido cierta recuperación en los precios y ayudado a las compañías que vendieron esas coberturas frente al default ruso.