_
_
_
_
_
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

El doble volantazo del automóvil en la carrera por ganar el futuro

El coche eléctrico y los modelos de mayores márgenes marcan las nuevas tendencias del sector

CINCO DÍAS

El sector del automóvil estaba inmerso en pleno cambio de paradigma cuando sobrevino la pandemia de Covid. Del tradicional modelo de combustión a la electrificación total, pasando por las diferentes tecnologías de transición, hay un largo recorrido que con mayor o menor impulso han acometido todos los grandes grupos y que en el caso de Europa tiene, por ahora, un horizonte fijado: la Comisión Europea ha marcado 2035 como la fecha límite para la venta de vehículos de combustión como parte de la lucha contra el cambio climático. Esta metamorfosis del automóvil, no por prevista menos impactante, ha supuesto una revolución en los centros de decisión, en los laboratorios de diseño, en las áreas de marketing y comercialización y, sobre todo, en las plantas de producción tanto de los propios grupos automovilísticos como de sus proveedores de componentes. Es el primer volantazo.

La llegada de la pandemia, con el subsiguiente estrangulamiento de la cadena de distribución, la crisis de la fabricación de chips –imprescindibles en la producción de automóviles y vitales en los nuevos modelos– y el hundimiento de los mercados a causa de los confinamientos impactó con fuerza en las casas fabricantes en un momento ya crítico. Y todo mientras las decisiones de compra de los usuarios siguen marcadas por la incertidumbre de por qué tecnología optar a la hora de hacerse con un nuevo automóvil o cambiar el viejo.

En este escenario, y cuando los mercados empiezan a dar señales de recuperación, los grandes grupos europeos sorprenden en el primer semestre de este año con unos resultados que crecen sólidamente mientas se frenan las ventas en unidades. La primera razón es que los fabricantes han priorizado –puede que de manera coyuntural–, la venta de sus modelos con mayores márgenes, pero también que las políticas de ventas se están reorientando hacia la mayor rentabilidad que hacia el volumen, algo que será más fácil para unos grupos que para otros. De consolidarse, ese será el segundo gran volantazo.

España, que por décadas se ha mantenido en el top10 de los productores mundiales de coches, se juega mucho en esta carrera. A pesar de haber perdido cualquier centro de decisión de la industria, las plantas españolas de los grupos internacionales siempre han disfrutado de justo prestigio por sus capacidades, una circunstancia a la que no es ajena la cualificación del capital humano y la flexibilidad de los representantes de los trabajadores. Todo ello ha influido en que lleguen nuevos modelos a las factorías. Por eso es fundamental que el ecosistema de producción –y las gigaplantas de baterías van en esa línea– sea lo suficientemente atractivo para hacer frente a unos desafíos sin precedentes.

Newsletters

Inscríbete para recibir la información económica exclusiva y las noticias financieras más relevantes para ti
¡Apúntate!

Archivado En

_
_