El Ibex firma su peor semestre desde la pandemia
La guerra de Ucrania y la subida de tipos de interés pasa factura a los mercados
Las firmas de análisis ya lo advertían en sus pronósticos de inicio de año. Con los bancos centrales rumbo a la normalización monetaria, la inestabilidad se apoderaría de los mercados. Después de ejercicios en los que la volatilidad se ha situado en mínimos históricos, el fin de los tipos cero, el estallido de la guerra en Ucrania y los elevados niveles de inflación han sembrado las dudas entre los inversores.
El endurecimiento del tono por parte de las instituciones monetarias para controlar los elevados precios no ha ayudado a templar los ánimos y en las últimas semanas los inversores han apretado el botón de vender ante los cada vez más persistentes temores de recesión. Después de la recuperación vivida en mayo, el junio el Ibex 35 retrocede un 8,5% en su peor mes desde marzo de 2020. El balance en el semestre no es mucho mejor. En los seis primeros meses del año el selectivo español retrocede un 7%, una caída solo superada por la experimentada con el estallido de la pandemia (-24,27%). La Bolsa española se afana por conservar los 8.000 puntos y se come casi todo lo ganado el año pasado (7,9%).
El comportamiento del Ibex 35 se mantuvo en línea con el registrado por el resto de Bolsas. El Dax alemán y el Mib italiano cierran el semestre con una caída del 19,5% y el 22,1%, el peor arranque de año desde 2008 y 2016, respectivamente. Por su parte, el Cac francés y el FTSE británico ceden un 17,2% y un 2,92%, descensos comparables con los registrados en el mismo periodo de 2020.
Peor comportamiento es el que registra la Bolsa estadounidense. Al cierre de los mercados europeos el S&P retrocedía un 20,4% en el que se confirma como el peor arranque de año desde 1970 mientras el Nasdaq se ve penalizado por la subida agresiva de los tipos de interés y cae un 29%, descenso solo equiparable a los registrados con el estallido de la crisis de las puntocom. Los expertos consideran que el S&P 500 podría seguir cayendo hasta los 3.100 puntos.
De momento los mercados solo han descontado expectativas. Está por ver si la desaceleración que empiezan a evidenciar los datos macroeconómicos se refleja también en las estimaciones de beneficios. Los analistas de Federated Hermes piden cautela y señalan que la economía mundial se tambalea al borde de la recesión.
"Vemos un mercado volátil tocando fondo en el tercer trimestre. Cabe ver una recuperación de la segunda mitad en forma de U. Nos enfocamos en valores defensivos, desde atención médica hasta altos dividendos", señala Ben Laidler, estratega de mercados de eToro. Desde PIMCO esperan que los mercados de renta variable ofrezcan rendimientos potenciales más bajos que los que los inversores han experimentado desde la crisis financiera mundial y refuerzan su apuesta por los valores de calidad.
Pero si inestable ha sido las Bolsas pero ha resultado el comportamiento de la renta fija. La retirada de los estímulos monetarios con los bancos centrales acelerando la subida de tipos se ha traducido en un incremento considerable de los rendimiento y consiguiente caída en precio de los bonos, unos activos que como señalan desde Bankinter viven su peor momento desde la década de los 90. Aunque el compromiso del BCE de poner en marcha un mecanismo para evitar el repunte de las primas de riesgo periféricas ha servido de alivio, la deuda española a 10 ha pasado del 0,56% de finales de 2021 al 2,4%. La italiana se sitúa en el 3,26% y la alemana al mismo plazo en el 1,36%. La prima de riesgo española se sitúa los 108 puntos básicos, lejos de los 74 puntos con los que comenzó el año, pero a cierta distancia de los 136 puntos que llegó a registrar semanas atras cuando el Christine Lagarde adelantó que en julio subirá los tipos en 25 puntos básicos. Por su parte, la italiana alcanza los 193 puntos, por debajo de los 242 de hace tres semanas.
El alza de las tasas en EE UU, un proceso mucho más acusado, ha contribuido al aplanamiento de la curva de deuda. El bono a 10 años cotiza en el 2,98% mientras la deuda cinco supera el 3%.
Los precios de la energía han sido los grandes responsables del repunte de la inflación. La guerra en Ucrania y la escasez energética a la que se enfrenta Europa se refleja muy bien en los precios del crudo. El Brent sube un 47,7% en el año hasta los 114,9 dólares, a cierta distancia de los 127,98 billetes verdes que tocó con el inicio de la guerra en Ucrania.