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Resultados de las elecciones

Las claves: Moreno duplica votos al absorber a C's, la izquierda dividida y el freno de Vox

El bipartidismo resurge en la región, con la lista de Moreno Bonilla y Espadas sumando más del 60%

Una votante, en las elecciones autonómicas de Andalucía, este domingo.
Una votante, en las elecciones autonómicas de Andalucía, este domingo. Getty Images
Gabriela López Escalante

La Junta de Andalucía consolida y agudiza la metamorfosisis de las elecciones pasadas. Con el escrutinio casi cerrado, Juan Manuel Moreno Bonilla ha consolidado este domingo una histórica victoria que le permitirá gobernar en solitario durante los próximos cuatro años, mientras que el PSOE sigue perdiendo el que fue su feudo electoral por casi 40 años.

La radiografía andaluza actual lanza un contraste notable con respecto a las elecciones de 2018 para todos los partidos. En aquel momento, el resultado electoral evidenciaba un mayor mix político —ninguno de los partidos contaba con más de 33 escaños— y la tarta del poder exigía negociar puentes para presidir la Junta.

En cambio, en el escenario de este domingo, ha resurgido el bipartidismo, con los populares a la cabeza: el PP y el PSOE suman más del 60% de los votos, siendo Moreno Bonilla el claro ganador de la noche, que ha conseguido soltar a Ciudadanos y a Vox para seguir al frente del Gobierno ahora en solitario.

De hecho, la lista del PP ha duplicado votos, pasando de unos 760.000 a 1.582.049 en cuatro años y mejorando su resultado en 32 escaños con respecto a 2018, al pasar de 26 diputados a 58, lo que le garantiza la mayoría absoluta. La victoria histórica del PP en la región se explica sobre todo por la debacle de Ciudadanos, cuyo medio millón de votos ha sido absorbido por completo por la lista de Moreno Bonilla, aunque el candidato del PP ha sumado también a su partido unos 250.000 votos más que han desangrado a la izquierda.

Así, Andalucía ha roto este domingo la tendencia de que un gran partido dependa de dos más pequeños para gobernar. Juan Marín, candidato por Ciudadanos, ha pasado de ser vicepresidente del Gobierno de Andalucía a quedarse sin representación en el Parlamento andaluz. La tolda naranja ha perdido este domingo el último Gobierno autonómico que le quedaba al descontar los 21 escaños que había conseguido en 2018, ahora capitalizados por el PP.

La mayoría absoluta de Moreno Bonilla también ha castigado a Vox. El partido de Santiago Abascal había irrumpido con fuerza en las elecciones pasadas y exigía la entrada en un gobierno autonómico. Pero con el resultado de este domingo, la lista encabezada por Macarena Olona queda anulada del futuro gobierno y parece haber frenado su avance. Aunque suma dos escaños para un total de 14 diputados, unos 70.000 votos más, si se compara el resultado con las elecciones generales de 2020, el partido pierde casi la mitad de sus votos, 390.000.

Entonces el PSOE apenas sacó un puñado de votos, frente a los 390.000 de este domingo. Ningún consuelo en mantenerse como segunda fuerza en otra noche dura para los socialistas, que han obtenido el peor resultado de la historia en la región. La lista encabezada por Juan Espadas ha perdido 300.000 votos, con respecto a 2018, y ha bajado en tres escaños hasta los 32. En términos porcentuales, los socialistas han perdido un 14% de los votos, que se traduce en menos de un 10% de los escaños.

La izquierda ha sido la gran derrotada de la noche, un retroceso que se explica por la división de Adelante Andalucía y Por Andalucía, que en conjunto han perdido un 24% de los votos con respecto a las elecciones de 2018. Además, y como cabe esperar en unas elecciones con ocho circunscripciones, el sistema electoral ha penalizado dicha división. Adelante Andalucía, que en las elecciones pasadas había conseguido 17 diputados, ha retrocedido hasta apenas dos. El otro partido derivado de la formación, Por Andalucía, ha sumado cinco escaños este domingo.

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