La rebaja del gas puede recortar el IPC anual hasta en dos puntos porcentuales
Los efectos de la bajada ya serán apreciables en mayo Un hogar medio puede abaratar su factura de 143 a 85 euros al mes
El mecanismo pactado esta semana entre España y Portugal y la Comisión Europea para poner un tope al precio del gas y moderar la escalada inflacionista en la electricidad podría recortar en hasta dos puntos porcentuales el avance interanual del IPC general. Es el cálculo aproximado que ofrecen varios expertos consultados, a la espera de conocer los detalles finales del plan que reconoce la excepción ibérica. Rebajando los precios de la electricidad, que iniciaron el pasado agosto su carrera alcista al superar los 122 euros/MWh, España podría controlar algo más la inflación, el gran quebradero de cabeza de la economía.
Según explica el director del gabinete económico de CC OO y profesor en la Universidad de Alcalá, Carlos Martín, el peso de la electricidad en el IPC ronda hoy el 4%. A partir de aquí, teniendo en cuenta la bajada de cerca del 50% en el precio, el IPC interanual podría recortarse en unos dos puntos porcentuales de forma inminente una vez que eche a rodar el mecanismo, previsiblemente la semana que viene. El impacto final dependerá de otros detalles adicionales, como la compensación que recibirán las gasísticas o el impacto de la medida en otros componentes energéticos.
Para Raymond Torres, director de coyuntura de Funcas, como consecuencia del abaratamiento de un 30% en el precio de la electricidad, el efecto puntual en la evolución del IPC podría traducirse en un recorte de 1,8 puntos porcentuales, si bien advierte que su evolución futura va a depender en gran medida de la fluctuación en la cotización del gas, así como las medidas que podría poner en marcha Rusia, como el reciente corte de suministro a Polonia y Bulgaria. Para Torres “es una medida que ayuda a moderar la inflación, pero no suficiente”. En su opinión sería deseable alcanzar un pacto de rentas entre salarios y márgenes empresariales, para evitar los temidos efectos de segunda ronda.
Para Miguel Cardoso, economista jefe para España de BBVA Research, a partir de mayo ya será patente esta caída en el precio del gas en el entorno del 30%, lo que en su opinión se traduciría entre 0,5 y 1 punto porcentual menos en el IPC general. Sin embargo, considera que lo más importante sería ver las expectativas en la evolución de los precios y los salarios. Otra segunda derivada de la bajada del gas empleado para la generación de energía eléctrica será apreciable en las cuentas públicas, ya que el descenso se traduciría en un importante ahorro a la hora de revalorizar las pensiones.
Cabe recordar que el precio medio de la luz en 2021 acabó en 119 euros/MWh frente a los 34 euros de 2020.
Según un estudio realizado por la OCU, el precio máximo durante los próximos 12 meses oscilará entre los 130 y los 140 MWh, muy por debajo de los máximos recientes, próximos a los 300 MWh. Esta organización especifica que un hogar medio con un consumo de 292 KWh con 4,6 kW de potencia contratada, obtendría una factura de 85 euros al año, frente a los 143 euros de marzo y los aproximadamente 100 euros en que podría cerrar abril. No obstante, sigue claramente por encima de los niveles de abril de 2021 donde pagaba 70 euros.