Macron y Le Pen se disputarán la segunda vuelta de la carrera al Elíseo
Con el 98% de voto escrutado la diferencia entre ellos es de cuatro puntos a favor del actual presidente
Emmanuel Macron se disputará la segunda vuelta de las elecciones presidenciales francesas con Marine Le Pen. El presidente saliente y la líder de la extrema derecha gala volverán a enfrentarse por el Elíseo al obtener Macron el 27,6% de las papeletas, y Le Pen, el 23,41%, con el 98% del voto escrutado, de acuerdo a los datos que suministra el Ministerio del Interior francés.
Ambos han vuelto a ser los candidatos más votados en la primera vuelta de las elecciones, celebrada este domingo en la que más de 48 millones de franceses votaban entre 12 candidatos, por lo que repetirán el duelo de la segunda vuelta registrado en 2017. Es la primera vez desde 1981 que no sucedía esa repetición de candidatos. Además, se trata del mejor resultado de la historia de la ultraderecha en una primera vuelta presidencial.
Tras ellos se ha situado Jean-Luc Mélenchon, líder de la izquierda radical y antiguo senador socialista, que ha obtenido el 21,95% de los votos. El ultraderechista Eric Zemmour ha logrado un 7,05%, mientras que la socialista Anne Hidalgo ha registrado una fuerte debacle que la ha dejado con solo el 1,74% de los votos.
Tanto Hidalgo, como otros dos de los candidatos el verde Yannick Jadot (4,58%) y el comunista Fabien Roussel (2,31%) llamaron ayer a votar por Macron en la segunda vuelta.
La participación en estos comicios ha caído al nivel más bajo desde 2012. La abstención se situó en el 25,14%, una cifra elevada que, de mantenerse en segunda ronda, podría desencadenar problemas de legitimidad para un Gobierno que quiere acometer grandes reformas.
Le Pen ha suavizado su imagen y ha logrado acortar distancias frente a Macron en las últimas semanas en un contexto plagado de incertidumbre económica y con unos precios de la energía disparados. La entrada tardía de Macron en campaña y su empeño por volver a incorporar en su programa el impopular plan para aumentar la edad de jubilación, que años atrás provocó la irrupción de los chalecos amarillos en escena han despertado poco interés entre los votantes.
De poco ha servido su fuerte puesta en escena europeísta y su papel en la guerra en Ucrania. Hace ahora cinco años, el partido de Macron logró el 32,2% de votos en la primera vuelta seguido de Los Republicanos –un partido de la derecha tradicional– (21,5%), el Frente Nacional de Le Pen (14%), ahora reconvertido en Reagrupamiento Nacional, Francia Insumisa (11%) y el PS (10,2%).
Desde Scope Ratings, sus analistas Thomas Gillet y Thibault Vasse, consideran que el próximo presidente de Francia heredará una deuda pública récord tras décadas de déficit presupuestario, pero también un marco fiscal reforzado recientemente, aunque no comparado con aquellos con un control más rigurosos como puede ser Alemania y los países nórdicos.
"El Gobierno de Emmanuel Macron ha reforzado el marco fiscal francés para revertir los años de déficits presupuestarios y la deuda pública cada vez más elevada que han diferenciado a Francia de otros miembros más austeros de la UE", afirma Gillet. La deuda pública de Francia llegará al 112,9% del PIB.
Macron pide el voto a todo el espectro político
El presidente francés, Emmanuel Macron, que ha encabezado la primera vuelta de las elecciones presidenciales, tendió anoche la mano a todos los electores y se dijo dispuesto a "inventar algo nuevo para unir convicciones y sensibilidades diversas" de cara a la segunda vuelta.
"Vuestra confianza me honra y me compromete (...) "No nos equivoquemos. Nada está decidido. Y el debate que tendremos en los próximos 15 días es decisivo para nuestro país y para Europa", afirmó Macron.
Insistió en que su proyecto es "el único" que puede responder a los retos que afronta el país, como la defensa del poder adquisitivo de los ciudadanos o la lucha contra el cambio climático.
En cambio, una exultante Le Pen aseguró que el presidente y ella representan "dos visiones diferentes de la sociedad" por lo que hizo un llamamiento a la unidad en torno a sí misma: "Todos los que no han votado a Macron están invitados a sumarse a esta unificación".