Sabadell vende 750 millones en deuda sénior preferente verde
Es la tercera operación ESG de la entidad y la primera del año
El estallido de la guerra Ucrania asestó la puntilla al mercado de capitales. Con las empresas y bancos saliendo del black out que acompaña a la presentación de resultados, los inversores se mantenían a la espera de que los emisores dieran su salto al mercado para captar recursos y seguir aprovechando los bajos tipos de interés antes de que los bancos centrales aceleraran la retirada de los recursos.
Después de varias semanas en las que la volatilidad paralizó por completo la actividad, los emisores que tenían previsto salir aprovechan cualquier mejora del mercado para seguir ejecutando sus planes. Una semana después de que Iberdrola colocara 1.000 millones en bonos al 1,37%, ahora las miradas están puestas en Sabadell. Como la eléctrica, la entidad elige la deuda verde, uno de los activos que mejor se comportaron en el año de la pandemia.
Sabadell ha captado 750 millones en deuda sénior no preferente verde. Los bonos tendrán una duración de cuatro años pero incluyen la opción de amortización anticipada al tercero. Aunque en las últimas semanas la volatilidad intradía se ha disparado y ha complicado fijar los precios, la entidad ha logrado una gran acaptación. La escasez de operaciones y la elevada liquidez que acumulan las carteras ha impulsado la demanda. Las órdenes de compra superaron los 3.400 millones. Esto ha permitido rebajar el precio en 30 puntos básicos, hasta los 220.
En referencia en euros, se trata de la primera emisión de Sabadell en el año y la senior no preferente verde desde junio de 2021 cuando levantó 500 millones en bonos a siete años con opción de amortización anticipada al sexto. Como viene siendo una corriente en las últimas emisiones efectuadas por los bancos europeos, Sabadell ha decidido incluir una opción de compra para maximizar su eficiencia pues los bonos perderán la consideración completa de MREL durante su último año.
En las primeras semanas del ejercicio, los bancos españoles en sintonía con el resto de entidades europeas reforzaron su actividad en el segmento de la deuda sénior con el objetivo de refinanciar los vencimientos y seguir cumpliendo con los requisitos regulatorios. Ahora es el turno de Sabadell. que quedó rezagado de esta corriente.
La emisión de este miércoles es la tercera operación ESG de la entidad, enmarcada en su marco de objetivos de desarrollo sostenible. Los ingresos obtenidos se emplearán para apoyar los proyectos verdes.