La mayoría de propietarios de casas opta por no aplicar la subida del IPC al alquiler
La Agencia Negociadora del Alquilerrecomienda a sus clientes que "no lo apliquen en su totalidad"
Después de tres meses de incremento desbocado del IPC, que se situó en febrero en el 7,6%, y en previsión de que siga subiendo como consecuencia de la guerra de Ucrania, la mayoría de los arrendadores en España están optando por no aplicar ese aumento en la revisión anual del alquiler de sus viviendas, según las empresas del sector.
Algunas como la Agencia Negociadora del Alquiler (ANA) están recomendando a sus clientes propietarios que "no lo apliquen en su totalidad y que actualicen la renta, por ejemplo, con un IPC a la mitad de su valor, o bien que no lo apliquen, dejando la renta como está", explica su directivo Sergio Zurdo.
Los expertos consideran que actualizar el alquiler con un IPC tan elevado puede producir rupturas de contratos, porque los inquilinos buscarán alquileres más baratos, y también dar lugar a impagos, debido a que los salarios no se han incrementado en la misma medida.
Según datos de la ANA -que administra alrededor de 5.000 viviendas, todas con contratos sujetos a la inflación-, en los últimos tres meses un 85% de los arrendadores no han aplicado el incremento total del IPC y, de esos, uno de cada cuatro (el 27%) directamente no ha subido la renta. Esta empresa cree que su recomendación se debe extender a todos los arrendadores en España, ya sean personas físicas o jurídicas, para amortiguar el impacto en los alquileres.
Además, advierte de que también se está disparando el coste de los suministros, sobre todo el gas y la luz, con lo que sube aún más la tasa de esfuerzo para pagar una vivienda de alquiler, que en España ya es de las más alta de Europa.
Sin embargo, desde la Asociación de Propietarios de Viviendas de Alquiler (Asval), que representa a grandes propietarios, declinan pronunciarse y recuerdan que se trata de "negociaciones individuales entre propietarios y arrendados".
Por su parte, Alquiler Seguro critica la indexación de los contratos al IPC recogida en la última modificación de la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU) y defiende la utilización del índice ARCA para actualizar las rentas de una manera "real" y "fiable". La actualización de rentas aplicando este índice se puede incluir en los contratos de arrendamiento mediante una cláusula legal, explica David Caraballo, gerente de Alquiler Seguro.
Con el último dato del índice ARCA, un contrato de alquiler con una renta de 700 euros firmado en febrero de 2021 se actualizaría en 719 euros, mientras que con el IPC subiría a 747 euros.