La fiscalía brasileña recomienda bloquear la venta de Oi a Telefónica, Slim y TIM
Competencia estudiará la transacción este miércoles
La fiscalía de Brasil ha recomendado al Consejo Administrativo de Defensa de Defensa Económica (CADE), que bloquee la venta de los activos de telefonía móvil de Oi a TIM Brasil, Telefónica y América Móvil, el grupo de Carlos Slim.
Waldir Alves, que representa a la fiscalía en organismo, ha señalado que el acuerdo debería ser bloqueado porque violaría la competencia, además de facilitar potenciales prácticas de exclusión, según Reuters. En cualquier caso, su recomendación no es vinculante, según distintos medios brasileños.
Este movimiento ha provocado una fuerte caída de las acciones de Oi, en situación de concurso de acreedores, el mayor de la historia de Brasil, desde 2016. Los títulos han llegado a dejarse más de un 10%. También las acciones de Telefónica Brasil y TIM registran bajadas en el entorno del 1%.
En principio, la autoridad de competencia tiene previsto estudiar este miércoles la transacción, que ya ha ido recibiendo distintas aprobaciones a lo largo del último año. Así, el regulador brasileño de las telecos Anatel, ya aprobó la transacción la pasada semana. Igualmente, en noviembre pasado, la Superintendencia General del CADE también recomendó que la transacción fuese aprobada con condiciones para los compradores, para mitigar los riesgos para la competencia.
En la transacción se han seguido los procedimientos legales aplicables. La propuesta de compra se hizo en una subasta pública en el marco de la recuperación judicial del operador y supervisada por el Ministerio Público de Río de Janeiro y por el Poder Judicial.
Algunos de los grupos inmersos en la transacción ya se han pronunciado. Telefónica Brasil ha señalado que “contrariamente a lo que afirma el fiscal, la oferta fue realizada conjuntamente por las tres empresas, pero no en forma de consorcio, y dará lugar a tres adquisiciones absolutamente independientes por parte de los compradores, que siguen y seguirán compitiendo enérgicamente en el mercado”. Según la teleco, las características de la compra propuesta pretenden preservar y fomentar la competencia en el mercado de la telefonía móvil”.
TIM Brasil, por su parte, ha negado que la compraventa de los activos de Oi afecte a la competencia. La filial de Telecom Italia advirtió de que “una caída desordenada de Oi traerá consecuencias caóticas para todo el sistema de telecomunicaciones, con impactos para la competencia, el consumidor y el avance digital del país”.
Telefónica, América Móvil y TIM Brasil se impusieron en la subasta de los activos de móvil de Oi en 2020. Las tres compañías acordaron el pago conjunto de cerca de 16.500 millones de reales. El grupo español se comprometió al pago de cerca de 900 millones de euros, a cambio de cerca de 10 millones de clientes.
La transacción supone la reducción del número de operadores móviles de red de cuatro a tres en el mercado brasileño, en línea con otros países como EE UU, Alemania o China.