Las pymes y su “gestión pasiva” frente a la crisis
Solo un 10% de las pequeñas y medianas empresas ha aprovechado para diversificar su actuación.
La mayoría de las pequeñas y medianas empresas (pymes) no ha aprovechado la crisis para diversificar su ámbito de actuación. Tan solo lo ha hecho el 10% de ellas. Así lo revela el estudio realizado entre 180 pymes europeas por el economista sevillano José Luis González.
El experto asegura que esta crisis ha sido “muy fuerte” y ha paralizado a la mayoría de las empresas. Según concluye, las empresas “han actuado con enorme cautela y miedo durante este periodo de incertidumbre, incorporando el teletrabajo, en los casos donde ha sido posible, como única medida relevante innovadora para mantener la actividad".
González indica que las pymes han realizado una gestión “pasiva” de la crisis. Según dice, a través de este estudio se ha comprobado que “en un porcentaje muy bajo las empresas han aprovechado esta crisis como una oportunidad para reducir costes superfluos, ser más competitivas y modernas e incorporar nuevas formas de trabajo". "
Según ha dicho, la mayoría de las empresas han actuado de una forma “pasiva”, ya que, tal y como apunta, “se han quedado a la espera de volver a la situación pre pandemia".
Mejora de rentabilidad
El experto ha recordado que la mitad de las empresas encuestadas “han sufrido un descenso en la facturación”, mientras que el resto lo ha mantenido y solo un 12% de ellas se ha beneficiado de la crisis. Por el contrario, al 20% de las empresas la crisis le ha hecho parar proyectos y cancelar algunos que se iban a llevar a cabo.
En cuanto a las preferencias laborales, un tercio de los entrevistados prefiere el teletrabajo. Esto ha supuesto un nuevo reto para las empresas que han visto cómo debían coordinarse mejor y llevar un mayor control de las actividades, entre otras actuaciones.
Las empresas, además, han tenido que realizar algunos cambios tecnológicos para conseguir que el trabajo se realizara de manera eficaz pese a no poder realizarse en la oficina. En un 20% de los casos se ha invertido en mejoras tecnológicas.
A nivel de gastos solo el 12% de los encuestados ha dicho haber aprovechado la situación para reducir los costes generales y para mejorar la rentabilidad.