Bruselas investigará a fondo si la compra de Kustomer por Facebook dañará la competencia
La CE quiere ver si la operación reduce la competencia en el mercado del software para la gestión de la relación con los clientes (CRM) y si aumenta el poder de la red social en la publicidad online
La Comisión Europea ha abierto una investigación a fondo de la adquisición de la startup Kustomer por parte de Facebook para determinar si respeta las normas comunitarias sobre fusiones o, por el contrario, puede dañar la competencia.
En un comunicado, el Ejecutivo comunitario precisó que investigará si la operación reduce la competencia en el mercado del software para la gestión de la relación con los clientes (CRM) y si esta compra puede aumentar el poder de la red social en el mercado de la publicidad online "al incrementar la cantidad ya significativa de datos" de que dispone la empresa de Mark Zuckerberg disponible para personalizar los anuncios que muestra.
Kustomer, con sede en Nueva York, vende software CRM a las empresas para que puedan comunicarse con sus clientes por teléfono, correo electrónico, mensajes de texto, WatsApp, Instagram y otros canales. Algo clave en esta era digital. La startup, fundada en 2015 por Brad Birnbaum y Jeremy Suriel, aglutina conversaciones de clientes provenientes de esos canales en una misma pantalla.
La medida de la Comisión se produce en un momento en que crecen las preocupaciones a ambos lados del Atlántico de que las big tech estadounideneses puedan utilizar la compra de startups para elevar su poder y cerrar las puertas a otros rivales. "Es importante revisar de cerca adquisiciones potencialmente problemáticas por parte de empresas que ya son dominantes en ciertos mercados", aseguró la vicepresidenta de la Comisión encargada de Competencia, Margrethe Vestager. "Esto aplica en especial al sector digital, donde Facebook ya disfruta de una posición de liderazgo tanto en la publicidad en línea como en canales de mensajería" como WhatsApp, Messenger o Instagram, añadió.
El Ejecutivo comunitario teme que Facebook bloquee el acceso de los rivales a WhatsApp, Messenger o Instagram, que son clave en la gestión de la relación con los clientes. "Nuestra investigación pretende garantizar que la transacción no dañará empresas o a los consumidores, y que cualquier dato al que Facebook consiga acceder no distorsiona la competencia", insistió Vestager.
Tras conocerse la investigación, Facebook ha señalado que cooperó con las autoridades de competencia de distintas partes del mundo y que continuará haciéndolo plenamente con la Comisión. Según la compañía, la transacción no daña la competencia "y traerá más innovación a empresas y consumidores en el espacio del CRM dinámico".
El Ejecutivo comunitario, que está trabajando "en estrecho contacto" con las autoridades de competencia de los Estados miembros, tiene hasta el 22 de diciembre de este año, para tomar una decisión. La Comisión recordó que la apertura de una investigación en profundidad no prejuzga su resultado final.
La adquisición de Kustomer, anunciada a finales de 2020 por 1.000 millones, está siendo analizada también por la autoridad de competencia del Reino Unido y de Alemania, además de por la propia Comisión. Esta se hizo cargo del caso, tras una solicitud de las autoridades austriacas, a pesar de que la compra de la startup no alcanza los umbrales de volumen de negocio establecidos por el Reglamento de Fusiones de la UE. Un hecho que hizo que la operación no fuera notificada a la Comisión Europea. Otros países como Bélgica, Bulgaria, Francia, Islandia, Italia, Irlanda, los Países Bajos, Portugal y Rumanía también se sumaron a la petición de Austria.
Según datos publicados por Facebook, que en junio superó el billón de dólares de valor en Bolsa, más de 175 millones de personas en todo el mundo contactan con negocios cada día a través de WhatsApp (de su propiedad), uno de los motivos que le llevó a tomar la decisión de adquirir Kustomer, informa Efe. La agencia añade que la idea de la red social es ofrecer los servicios de gestión de clientes de Kustomer a sus anunciantes para facilitar y mejorar la comunicación entre estos y sus clientes, lo que a su vez podría repercutir en mayores inversiones de publicidad en Facebook.