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El Gobierno aprueba el anteproyecto de ley de startups

El documento responde a las principales demandas del sector para atraer inversión

La ley de startups sigue adelante. El Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha aprobado el anteproyecto de ley que pretende fomentar la creación de este tipo de empresas en España.

El texto recoge la singularidad de este tipo de empresas. Además, responde a las principales demandas del sector para conseguir visibilidad y atraer inversores. En ese sentido, se promueve la atracción de talento y de capital internacional.

El Gobierno quiere regularizar las actividades de las empresas emergentes. La ley de startups proporcionará la flexibilización de las actividades de este tipo de empresas. En ese sentido, se les ayudará, fundamentalmente, en sus primeras etapas. Cabe destacar que cuando se crea una startup hay que realizar una serie de trámites que la penalizan con respecto a otras empresas. La ley regulará esos trámites, entre los que se encuentran algunos relacionados con la fiscalidad o el trámite de visados.

Empresas emergentes

El Ministerio ya ha publicado en audiencia el nuevo texto. En él tienen cabida las empresas de nueva creación, así como empresas emergentes. La sede social de las empresas y de los emprendedores debe estar de forma permanente basado en España. Además, las empresas no tienen que haber distribuido dividendos, no deben ser cotizadas y deben tener un carácter innovador, como requisitos fundamentales.

Algunas de las medidas que se incluyen en este documento son la reducción del tipo impositivo del 25% al 15% sobre el impuesto sobre la renta de no residentes. Esta reducción tendrá efecto en el primer periodo impositivo en el que la base imponible sea positiva. Además, se mantendrá en los durante los tres periodos siguientes siempre que la compañía siga siendo calificada como empresa emergente.

Aplazamiento de la deuda tributaria

Las startups podrán también pedir un aplazamiento de la deuda tributaria que tengan del impuesto de sociedades o del impuesto sobre la renta de no residentes. Podrán hacerlo tanto en el primer ejercicio en el que su base imponible sea positiva, como en el siguiente y sin devengo de intereses de demora.

De igual forma, se agilizan los trámites y desaparece la obligación de que las empresas tengan que pagar de manera fraccionada el impuesto de sociedades y el impuesto sobre la renta de no residentes en los 2 años posteriores a aquel en el que la base imponible sea positiva.

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