Los desacuerdos en la OPEP pesan menos que su momento dulce
Es probable que se acabe alcanzando un pacto que amplíe provisionalmente los recortes hasta el final de 2022
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) está pasando un verano difícil. Los 13 miembros de la Organización y 10 aliados, entre los que está Rusia, conocidos todos ellos como OPEP+, no alcanzaron un acuerdo el lunes sobre cómo deshacer los recortes de producción que se adoptaron después de que la pandemia precipitase la caída de la demanda mundial. Pese a las inoportunas disputas, están tranquilamente esperando acontecimientos.
La mayoría de los miembros de la OPEP+ están adhiriéndose a los recortes asignados. También parecen estar de acuerdo en lo relativo a la necesidad de incrementar la oferta el mes que viene para impedir que una rápida recuperación económica mundial impulse el precio del barril por encima de los 77 dólares. Pero Arabia Saudí, el líder de facto del grupo, no quiere deshacer del todo los 5,8 millones de barriles diarios recortados hasta finales del año próximo, en vez del próximo abril, como está previsto: las variantes de Covid-19 podrían exigir nuevos confinamientos y podría volver la oferta iraní. Emiratos Árabes Unidos (EAU) solo aceptará un acuerdo que les permita extraer más.
Arabia Saudí está acostumbrada a que los miembros faltos de liquidez intenten soslayar los recortes. Pero EAU suele ser un aliado estrecho. También tiene mucho peso, ya que produce el 8% de los 50 millones de barriles de producción diaria de OPEP+. Que el desacuerdo actual sea público exacerbará la vieja rivalidad entre Abu Dabi y Riyadh sobre cuestiones como atraer a empresas extranjeras. Aun así, son incordios menores dado el momento dulce en que se encuentra el grupo de productores de petróleo.
El repunte en el consumo de crudo significa que el mercado de petróleo registrará un déficit hasta finales de 2022, según cálculos de Morgan Stanley. Tampoco los productores de esquisto, que suponen el grueso de la producción diaria de crudo en Estados Unidos, se están comportando como suelen. El cambio climático y la preocupación por la rentabilidad están disuadiendo a los grupos petrolíferos cotizados de aumentar la producción como suelen hacer cada vez que suben los precios. Los datos de Rystad Energy muestran que solamente las empresas privadas en Estados Unidos operan más plataformas productoras de petróleo. Esto significa que Arabia Saudí podrá beneficiarse del alto precio del petróleo sin temor a perder cuota de mercado.
Es improbable que el desacuerdo lleve a EAU a abandonar la OPEP, una decisión que provocaría un desplome del precio del petróleo. Es más probable que se acabe alcanzando un acuerdo que amplíe provisionalmente los recortes de producción hasta diciembre de 2022 y permita a EAU extraer más, con lo que se evita el tener que tomar una decisión final. El precio del petróleo seguirá siendo elevado durante un tiempo.