La inversión inmobiliaria se dispara un 789% en el segundo trimestre
Alcanzará alrededor de 2.300 millones de abril a junio, según JLL La logística sigue concentrando el interés de los compradores
El apetito por el mercado inmobiliario está dando la vuelta de forma rápida a las cifras tras el parón por la pandemia de Covid-19 en 2020. La inversión alcanzará este segundo trimestre del año alrededor de 2.300 millones de euros, según previsiones de la consultora JLL. Se trata de un salto del 782% respecto al mismo periodo del ejercicio anterior, cuando el confinamiento hizo casi imposible las transacciones.
El ritmo es también un 253% más elevado que los 632 millones al primer trimestre. Estas cifras recogen las operaciones en terciario (oficinas, superficies comerciales y logístico/industrial). El volumen de abril a junio ya se parece a los años prepandemia, de hecho es mayor que en 2019 y 2018.
Aún así, el ritmo puede ser mayor. Sergio Fernandes, director de inversiones de JLL, explica que todavía no se ha recuperado totalmente el mercado de la inversión, debido al capital récord levantado por los fondos y el apetito por hacerse con activos. “Estamos a mitad de camino”, opina. Este experto cree que en los próximos meses el sector se acercará a la normalidad una vez que continúe avanzado rápidamente la vacunación y se reestablezca el turismo.
Parte de este gran salto de inversión en el trimestre viene explicado por una única operación, la adquisición por parte de Bankinter de la cartera logística de CBRE GI y Montepino, valorada en alrededor de 1.200 millones. De hecho, este segmento industrial bate así un récord en los últimos años con casi 1.500 millones de inversión.
Fernandes recuerda que la pandemia ha acelerado el comercio electrónico creando una gran demanda en el mercado logístico, donde los inversores han entrado con fuerza para posicionarse, incluso fondos más conservadores a los que antes no les interesaban estos activos. “En logística hay producto, hay apetito y hay demanda”, detalla este experto de JLL respecto a las inversiones que se esperan en el sector. “Normalmente hay una correlación directa entre el crecimiento del PIB y la inversión en activos inmobiliarios. Por primera vez, hemos visto que esto no es verdad en el caso de la logística como efecto del ecommerce”, afirma. En logística también destaca la compra por Axa de la plataforma de Día en Illescas (Toledo) por 60 millones o la UBS en Plaza Zaragoza por 58 millones.
En el caso de las oficinas, el sector tradicionalmente con más peso en las transacciones, la cifra se sitúa en 487 millones (a falta de tres días para el cierre del trimestre), más que el doble que el año anterior. La subida interanual es más acusada en Barcelona, un 169%, gracias por ejemplo a la venta de un activo de Blackstone a IBA Capital por 120 millones en el 22@. En Madrid, sin embargo, la falta de producto en venta hace que el apetito inversor no se satisfaga y los compradores estén mirando a otras plazas como Bilbao. En el caso de activos value added o en zonas secundarias, los inversores han ajustado precios buscando mayores retornos, “aunque aún es pronto para que oferta y demanda se encuentren”, según JLL.
En el caso de los activos de retail, dañados desde hace años por el peso creciente del comercio online, el volumen de transacciones alcanza de abril a junio los 250 millones, frente al parón absoluto del año anterior. Aunque en centros comerciales el apetito sigue siendo escaso, en locales ha ganado cierto interés, como demuestra la compra de Puerta del Sol 11 en Madrid al fondo Thor por parte de Bankinter por 80 millones. Igualmente se espera que la venta de carteras de supermercados, que han resistido bien la crisis, sigan atrayendo con fuerza al capital.