Los 27 ratifican el fondo de recuperación y permiten a Bruselas emitir deuda
La Comisión podrá acudir a los mercados en junio y transferir el dinero a las capitales a partir de julio
Los 27 países de la Unión Europea han completado definitivamente el proceso de ratificación del fondo de 750.000 millones de euros con el que pretenden impulsar sus economías tras el impacto de la pandemia de coronavirus. El trámite, que tenía que aprobarse en los respectivos parlamentos nacionales, era indispensable para que la Comisión Europea pudiese acudir a los mercados para emitir deuda, un movimiento que podrá llevar a cabo ya en el mes de junio. "La Comisión está dispuesta a acudir a los mercados para recaudar fondos y hacer que la UE sea más ecológica, digital y resistente", ha dicho este viernes la presidenta del Ejecutivo Comunitario, Ursula von der Leyen.
La ratificación formal y los próximos pasos a seguir fueron anunciados la noche del jueves por el comisario de Presupuestos, Johannes Hahn, después de que los parlamentos de Austria y Polonia, los últimos en formalizar este proceso, dieran su visto bueno a la Decisión de Recursos Propios de la UE, la normativa que en la práctica permite a Bruselas acudir a los mercados de deuda.
"Confío en que podamos finalizar los pasos que quedan en mayo, lo que nos permitiría poner en marcha el fondo de recuperación y empezar las emisiones en los mercados de capitales ya en junio", subrayó el austriaco en la red social Twitter.
Una vez superados los pequeños trámites a los que se refiere Hahn, el Ejecutivo comunitario podrá captar los fondos a través de la emisión de bonos y transferir después esos recursos a los Estados miembros en forma de subsidios y préstamos. En su caso, España tiene asignados algo más de 70.000 millones en subvenciones directas y otros 70.000 millones en créditos blandos, una cantidad que irá recibiendo poco a poco, en función de la consecución de los diferentes hitos y objetivos que recoge el Plan de Recuperación remitido hace casi un mes a Bruselas y que todavía tiene que ser aprobado.
La intención del Ejecutivo comunitario es que los primeros desembolsos para los países sean en el mes de julio, después de que los planes de reformas e inversiones que los Estados miembros han enviado a las autoridades comunitarias sean doblemente aprobados. Estos planes, de un lado, necesitan del visto bueno de la propia Comisión, que tiene hasta dos meses desde la recepción de los documentos para dar su beneplácito. A partir de ese momento, el testigo pasaría al conjunto de países de la UE, representados en el Consejo Europeo, que tendrán otros 30 días para dar luz verde a los proyectos. En total, el plácet del plan español podría dilatarse hasta finales del mes julio.
El propio Ejecutivo, tal y como expuso esta misma semana el presidente, Pedro Sánchez, confía sin embargo en que el documento español tenga el visto bueno definitivo "a principios del mes de julio". “Este plan lo hemos presentado a la Comisión Europea el 30 de abril y está en fase de estudio y tengo el convencimiento de que va a ser evaluado positivamente en la segunda quincena de junio”, explicó Sánchez en un acto del Instituto de Comercio Exterior (ICEX). Sánchez asumió así que poco después el plan será validado por el Consejo Europeo y que "a principios del mes de julio” el Ejecutivo estará en disposición de comunicar oficialmente la puesta en marcha de todos los proyectos recogidos en el documento.
Si el plan enviado por el Gobierno el pasado 30 de abril supera el examen tanto de la Comisión como del resto de países, España podrá recibir un anticipo de unos 9.000 millones de euros en julio que ya está garantizado. A partir de aquí, y en función de la consecución de los hitos y objetivos, se abre un proceso por el que los socios recibirán dos pagos anuales. España optaría de esta forma a un segundo tramo de 16.000 millones antes de que acabe el año 2021, sumando así los 27.000 millones comprometidos para el ejercicio.
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