Abengoa insiste ante la CNMV en la oferta del fondo Terramar
La empresa remite la oferta del fondo, condicionada al apoyo de la SEPI y los acreedores
Abengoa ha vuelto a remitir a la CNMV la oferta planteada por el fondo estadounidense Terramar, operación de la que ya informó hace dos meses y que implicaría la aportación de 200 millones de euros por parte de dicho fondo. La sociedad ha comunicado al supervisor de los mercados que Terramar ha realizado una "oferta final", mientras que la presentada en marzo era no vinculante.
La eventual operación consistiría en proporcionar financiación por 200 millones, una parte en forma de préstamo (parte como línea provisional y otra parte como préstamo ordinario), acompañado de una apertación de capital. La oferta, en todo caso, está condicionada a la aportación de 249 millones por parte de la SEPI, dentro del plan de ayudas directas a empresas, y de la aportación de 300 millones de euros en avales por parte de la banca.
La oferta se lanza nosobre Abengoa sino sobre Abenewco1, sociedad que agruparía los activos del grupo. Un esquema que ha provocado el rechazo de los inversores minoritarios, agrupados en la plataforma AbengoaShares, que suma más del 15% de la matriz cotizada. Ramón y Cajal Abogados, por su parte, pilota los planes de rescate de la empresa, que no dispone de demasiado tiempo. Ha aplazado hasta el 21 de mayo los vencimientos de los instrumentos de deuda con los proveedores del grupo encabezado por Abengoa Abenewco 1, plazo que vencía inicialmente a finales de marzo y que se prorrogó hasta el 7 de mayo.
No obstante, el plan ya encalló hace semanas, ante las dudas tanto de la administración pública como del sindicato de bancos. En caso de prosperar, la operación daría a Terramar el 70% del capital de la nueva Abengoa.
La empresa pidió en febrero concurso de acreedores para la matriz, a la espera de intentar un rescate a través de Abenewco 1. Éste fue propiciado por la decisión de los bancos de retirar el waiver (acuerdo de no agresión), que habían extendido sobre la firma desde que en agosto pactaron el rescate de la firma. Entonces acordaron la inyección de más de 500 millones, con aval del ICO y Cesce, más 20 millones aportados por la Junta de Andalucía. La institución autonómica finalmente decidió no suscribir esta cantidad, lo que terminó por hacer fracasar el acuerdo y abrió la puerta al plan B capitaneado por Terramar.
Además de Terramar, el grupo mexicano de los Amodio, que ya controla OHL, ha manifestado interés en el grupo andaluz. Si no se producen movimientos, la empresa está a un paso de protagonizar el segundo mayor concurso de acreedores en España. El pasivo de Abengoa a cierre de 2019 fue unos 6.000 millones, por detrás de los 7.200 millones de la quiebra de Martinsa Fadesa.