El 5% de los depósitos a hogares de la zona euro está a interés negativo
El porcentaje se duplica en el caso de Alemania, según ha explicado hoy Lagarde
Los tipos negativos son una herramienta más de política monetaria, y muy efectiva, según ha defendido hoy en rueda de prensa la presidenta del BCE, Christine Lagarde. La institución entró en el territorio de los tipos bajo cero en junio de 2014, cuando rebajó la facilidad de depósito por primera vez a terreno negativo, en el -0,1%. Y esa tasa, con la que el BCE penaliza el exceso de liquidez de los bancos con el objetivo de que den más crédito, se elevó al -0,5% en septiembre de 2019, nivel al que sigue desde entonces.
Uno de los efectos evidentes de estos tipos negativos ha sido la caída en picado de las rentabilidades de los depósitos, hasta el punto de que algunas entidades han empezado a cobrar a los clientes por la liquidez y el ahorro que tienen depositados en sus bancos. Primero a los grandes clientes institucionales pero más recientemente también a los clientes particulares.
Según ha reconocido Lagarde, el 5% del total de depósitos de los hogares de la zona euro está a interés negativo. Es decir, los clientes han de pagar a su banco por tenerlos. El porcentaje se duplica en el caso de Alemania, al 10%, un país donde la política ultraexpansiva del BCE tiene precisamente muy mala prensa entre la población a causa de su impacto en las rentabilidades de los ahorros.
En España, donde los depósitos son el activo de inversión predilecto de los hogares (en una tendencia acentuada aún más por la crisis), los bancos están evitando por el momento cobrar por su ahorro a los pequeños inversores, aunque ya comienza a haber excepciones. BBVA empezó a cobrar por saldos superiores a los 100.000 euros e ING, por cuantías en su cuenta por encima de los 30.000 euros.
Lagarde ha defendido que los tipos negativos son una "herramienta efectiva" para lograr que la política monetaria del BCE se traslade a la economía real, puesto que contribuye a abaratar el coste de financiación y a incentivar la concesión de crédito. Y ha recordado que en los hogares "no solo hay ahorradores" sino también solicitantes de financiación.