Vinci compra moda española cara
La falta de ahorro de costes de la compra a ACS implica que su beneficio operativo tendrá que crecer mucho para que funcione
Estar a la moda cuesta dinero. Eso es lo que dice la pródiga Vinci. El jueves subió un 3% en Bolsa tras acordar pagar 4.900 millones en efectivo para ampliar su cuota de renovables –que están en boga– comprando parte de ACS. Es cierto que la empresa dirigida por Xavier Huillard ha negociado un modesto descuento sobre el precio original. Pero la falta de ahorro de costes implica que tendrá que hacer crecer con fuerza su beneficio operativo para que funcione.
La operación da a la división de ACS un valor de 4.200 millones, una vez descontados 700 millones de efectivo neto. Supongamos que Huillard puede aumentar los 375 millones que obtuvo la unidad en beneficio operativo anual entre 2018 y 2020 en un 10% en los próximos años.
Tributados al 30%, eso implica que la compra podría agregar 289 millones a la cuenta de resultados de Huillard, ampliamente en línea con el coste de capital de Vinci, estimado en el 7%. Necesitará un fuerte viento de cola.
Los autores son columnistas de Reuters Breakingviews. Las opiniones son suyas. La traducción, de Carlos Gómez Abajo, es responsabilidad de CincoDías