Las condiciones de los ‘riders’ enfrían las expectativas de Deliveroo en Bolsa
La empresa de envío de comida a domicilio fija en 3,9 libras su debút, el mayor en la Bolsa de Londres en una década
Deliveroo se estrena hoy en la Bolsa de Londres con unas expectativas por debajo de lo esperado. La compañía de envío de comida a domicilio ha fijado su precio de salida en la parte baja de su horquilla, en 3,9 libras (4,57 euros). Con ello, partirá de una capitalización de 7.600 millones de libras (8.900 millones de euros), lo que convertirá su oferta pública de venta (OPV) en la mayor en el parqué londinense desde el estreno de Glencore hace una década.
Aunque había mucha expectación sobre esta salida a Bolsa, la empresa ha descubierto que las condiciones laborales de sus trabajadores pueden jugar en su contra. Legal & General Investment Management, Aberdeen Standard Investments y Aviva Investors, tres de los mayores gestores de fondos británicos han anunciado que no participarán en la operación porque el trato proporcionado a los riders no se adecua a sus criterios de inversión socialmente responsable.
No obstante, Deliveroo llega a los parqués respaldada por buenas cifras de negocio en 2020: registró un incremento interanual de las operaciones totales del 121% en todo el mundo y del 130% en Reino Unido e Irlanda. Aunque la empresa sigue sin lograr entrar en beneficios, sus pérdidas se redujeron un 29,5%. También es un punto a su favor el apoyo de Amazon, que en verano se hizo con un 16% de su capital–se reducirá al 11,5% tras la OPV–.
Cambio de rumbo en 2021
La salida a Bolsa de Deliveroo es la continuación de un boom iniciado antes de la pandemia pero impulsado por las restricciones a la movilidad y las limitaciones de aforo impuestas a la hostelería. Todo ello ha derivado en una mejora de los cifras de negocio del sector de la comida a domicilio, pero también en su desembarco en los mercados.
Hasta ahora, los debuts de 2020 de empresas de entrega de comida a domicilio habían sido exitosos, pero la llegada del nuevo año ha traído consigo caídas en Bolsa. JustEat, que se estrenó en febrero del año pasado en la Bolsa de Londres, se revalorizó un 12% en 2020, pero en lo que va de ejercicio se desploma un 20%.
Mejor fue el comportamiento de la estadounidense DoorDash, que se disparó un 80% en su debut el pasado mes de diciembre. Un impulso que no ha conseguido mantener y desde entonces se revaloriza tan solo un 23%, también debido a la caída registrada con el nuevo año, de casi el 9%. Delivery Hero, veterano del sector en el mercado de renta variable, pues debutó en la Bolsa alemana en 2017, no se libra tampoco de los descensos en 2021 y se anota una caída del 14% tras revalorizarse un 80% el año pasado.
Detrás de estos retrocesos está el comienzo de la vacunación frente al Covid y las expectativas de una apertura de las economías que llevarían de nuevo a los usuarios de estas plataformas a consumir la comida en los restaurantes y prescindir de sus servicios.
No obstante, las caídas están ligadas también al mal momento que registra el sector tecnológico ante las numerosas voces que apuntan a una sobrevaloración de estas empresas. El Nasdaq se anota una subida inferior al 2% en el año, mientras que el Dow Jones suma más de un 8%, y en Europa, con escasa presencia de estas compañías en sus índices, el Eurostoxx se anota un 9%.
Pese a todo, desde UBS mantienen su apuesta por las empresas de entrega de comida a domicilio y estiman una tasa de crecimiento anual compuesta (CAGR) superior al 20% hasta 2024 debido a tres factores acentuados con el Covid: su penetración cada vez mayor, el aumento de los pedidos debido a un cambio cultural y el incremento del valor de estos. No obstante, subrayan que la regulación será uno de los principales desafíos que tendrá que hacer frente en Europa.