EE UU mantiene en el 3,5% la estimación de caída del PIB en 2020
La economía creció un 4,1% en el cuarto trimestre, una décima más de lo calculado inicialmente
La actividad económica de Estados Unidos creció a una tasa anual del 4,1% en el cuarto trimestre de 2020, una décima más de lo calculado anteriormente, pero en el conjunto del año sufrió una caída del 3,5%, informó hoy la Oficina de Análisis Económico.
En el segundo de sus tres cálculos del producto interior bruto (PIB), dicho organismo añadió una décima a su cálculo preliminar de crecimiento del cuarto trimestre del año, publicado en enero, pero mantuvo sin cambios el resultado anual.
La contracción estimada del 3,5% en 2020 respecto al año anterior contrasta con el crecimiento del 2,2% de 2019, como consecuencia del impacto de la pandemia del Covid-19 y de las restricciones implementadas para contener la propagación de los contagios. Este dato representa la mayor caída del PIB desde 1946 y la primera contracción desde 2009, cuando la actividad retrocedió un 2,5% por la crisis financiera.
Durante el cuarto trimestre del año, el PIB experimentó una contracción del 1,9% en comparación con el mismo periodo de 2019, tras un descenso del 2,6% en el tercer trimestre, del 9% en el segundo y un incremento del 0,6% en el primero. En términos anualizados, es decir, extrapolando los datos del trimestre al conjunto del año (la forma preferida por la BEA para informar de los datos), la economía del país norteamericano creció un 4,1% entre octubre y diciembre, tras un incremento del 33,4% en el tercer trimestre, una caída del 31,4% en el segundo y un descenso del 5% en el primero.
El gasto de los hogares siguió moderando su descenso en el último trimestre del año, hasta registrar una caída del 2,3% en comparación con los datos del mismo periodo de 2019, lo que supone una décima menos que el dato estimado en enero.
En cambio, la Oficina ha revisado al alza el dato de inversión de las empresas, hasta registrar un crecimiento del 5% frente al cuarto trimestre de 2019, en comparación con el alza del 4,7% estimado en enero.
Durante el trimestre, los ingresos disponibles de los estadounidenses experimentaron una caída del 8,6%, lo que supone un empeoramiento de cinco décimas en comparación con la primera estimación del dato. Como consecuencia de esto, la tasa de ahorro se ha revisado en cuatro décimas a la baja, hasta el 13%.