Juan José Sánchez: “Hay un abundante capital que quiere invertir en renovables”
La compañía fue la gran triunfadora en la última subasta, con 620 MW eólicos P Desde finales de 2020 comercializa luz y los primeros pasos están siendo “muy positivos”. Centrada en España y Portugal, a medio plazo no descarta nuevos mercados
Juan José Sánchez (Madrid, 1979), consejero delegado de Capital Energy, se incorporó a la compañía en abril de 2019 procedente de Enagás. Su objetivo es “realizar una contribución decisiva a la transición ecológica”, para lo que trabajan “intensamente” en la obtención de financiación y talento. En tres años la plantilla ha crecido de 30 a 350 personas y en 2021 pretende subir a 485. Invertirá más de 10.000 millones de euros hasta 2025.
- R. ¿Qué supone para la empresa la adjudicación en la última subasta de 620 MW eólicos?
- R. El resultado ratifica la credibilidad de nuestro proyecto empresarial y nuestra vocación industrial de largo plazo. El hecho de habernos adjudicado 620 MW supone un hito muy relevante que pone de manifiesto una serie de fortalezas, como la eficiencia, la competitividad de nuestros proyectos y la flexibilidad de una cartera de gran tamaño a la hora de decidir las coberturas de riesgos. Estas fortalezas nos han permitido presentar ofertas competitivas sin renunciar a la rentabilidad exigida por nuestros accionistas.
- R. ¿Qué le parece este tipo de adjudicación?
- R. Son necesarias para el sector en su conjunto si queremos cumplir los objetivos establecidos, y abogamos por ellas siempre que el diseño sea el adecuado. Nuestra estrategia pasa por diversificar las vías de acceso de nuestros proyectos al mercado, a través de la comercialización de energía limpia a clientes finales, los contratos a largo plazo o las propias subastas.
- R. ¿Cuándo conectarán a la red?
- R. La capacidad adjudicada tiene hasta principios de 2024 para entrar en operación. Esperamos poner en funcionamiento nuestros parques eólicos antes de esa fecha con cierta holgura.
Contemplamos distintas vías de financiación para desarrollar nuestro negocio, incluida la salida a Bolsa
- R. ¿En qué proyectos están trabajando en la actualidad?
- R. Tenemos dos proyectos en operación, uno eólico y otro fotovoltaico, que suman 64 MW. Estamos construyendo dos proyectos eólicos más por 88 MW, uno en Asturias y otro en Andalucía, e iniciando las obras de una planta fotovoltaica de 20 MW en Extremadura.
- R. ¿Cómo está distribuida su cartera de renovables?
- R. Contamos con una cartera de proyectos eólicos y solares en estudio y en desarrollo que se acerca a los 38 gigavatios de potencia, de los que alrededor de 8,5 GW ya disponen de los permisos de acceso a la red concedidos, estando 172 MW en operación o construcción. El 85% de la actividad es eólica y el resto, fotovoltaica.
- R. A nivel de mercado, ¿qué cuota tienen?
- R. Si contamos solo los proyectos operativos o en construcción, nuestra cuota es todavía muy pequeña. Pero si observamos los que están en desarrollo, somos una de las compañías líderes del sector. Aunque es difícil hablar de cuotas porque no hay datos públicos exhaustivos a este respecto, en proyectos eólicos en desarrollo con los permisos de acceso a red aprobados nos acercaríamos al 20%. En la última subasta fuimos adjudicatarios sobre un 20% de toda la capacidad subastada y un 62% de la eólica asignada.
- R. ¿Tienen previsto crecer en el exterior?
- R. Estamos centrados en desarrollar nuestro plan de negocio en España y Portugal. A medio plazo, no descartamos expandirnos a otros mercados donde podamos implantar un modelo similar al mercado ibérico como consecuencia de nuestra evolución natural como compañía.
- R. Han comenzado a comercializar luz para particulares. ¿Cómo va la iniciativa?
- R. Lanzamos nuestra propia comercializadora el año pasado, culminando el objetivo de estar presentes en toda la cadena de valor del sector renovable. Nuestra propuesta, muy competitiva en precio y calidad de servicio, es generar nuestra propia energía 100% renovable y llevarla sin intermediarios hasta los hogares, las pymes y las grandes empresas. El foco en el corto plazo lo estamos centrando en crear un modelo operativo ágil, digital, eficiente en costes y escalable, que nos ayude a crecer centrando nuestros esfuerzos en ofrecer un gran servicio a nuestros clientes finales. Los primeros pasos están siendo muy positivos.
- R. La UE se ha fijado como objetivo que las renovables supongan un mínimo del 32% del consumo final para 2030 ¿Lo considera factible? ¿Cómo ve España?
- R. Sin duda es factible, y España reúne las condiciones adecuadas para convertirse en uno de los principales motores en este ámbito en los próximos años. Nuestro excelente recurso renovable, con mucho potencial por explotar, y una industria de primer nivel son unas bases más que sólidas para alcanzar los objetivos establecidos y contribuir a transformar nuestro modelo económico hacia uno más sostenible.
Es positivo que todo el sector energético contribuya a financiar la transformación hacia las renovables
- R. ¿Qué vías de financiación están utilizando? ¿Contempla la salida a Bolsa?
- R. Seguimos muy de cerca la evolución de los mercados y estamos evaluando distintas alternativas para financiarnos mediante instrumentos a corto, medio y largo plazo. Nuestro sector vive un gran momento; todo el mundo quiere participar de este cambio y hay abundantes fuentes de capital queriendo invertir y financiar proyectos renovables de calidad. No descartamos ninguna opción, incluida la salida a Bolsa.
- R. ¿Cómo valora la creación del Fondo Nacional para la Sostenibilidad del Sistema Eléctrico?
- R. Es bueno que todos los sectores energéticos contribuyan a financiar el cambio del modelo a través de las energías renovables.
- R. ¿Y el nuevo reglamento para el acceso y conexión a las redes?
- R. Era necesario y urgente ordenar este ámbito normativo en mayor medida. El reglamento contribuye a reducir la especulación y abre nuevas vías de desarrollo renovable, como la hibridación, con gran potencial.
- R. ¿Qué retos tiene el sector?
- R. Estamos frente a una oportunidad única de llevar a cabo una profunda transformación del actual modelo energético hacia uno plenamente sostenible. Pero para lograrlo necesitamos acelerar la implantación de tecnologías de generación de electricidad limpias y aprovechar la digitalización de cara a maximizar la eficiencia en beneficio último de los clientes, que van a pasar a tener un papel protagonista.
