Indra desarrollará un centro de entrenamiento en blindados con 28 simuladores conectados

Se adjudica un contrato con la Dirección General de Armamento y Material con simuladores Pizarro, un tipo de vehículo blindado

Logo de Indra en la sede de la compañía en Madrid.

Indra se ha adjudicado un contrato con la Dirección General de Armamento y Material para dotarse de 28 simuladores del Vehículo de Combate de Infantería/Caballería Pizarro fases I/II, que se integrarán con la plataforma de entrenamiento virtual de serious games, que ya emplea el Ejército de Tierra, para crear el que será "uno de los centros de simulación distribuida más avanzado de Europa y el mundo", según informa la compañía.

Los simuladores del Pizarro, un tipo de blindado que está preparado para moverse en primera línea de combate con un pelotón de soldados a bordo, se instalarán en distintas bases distribuidas por toda España, que se conectarán en red para realizar ejercicios conjuntos en remoto.

Cada uno de los 28 simuladores contará con un simulador de puesto de conductor y otro de torre (que incluye puestos de jefe de vehículo y tirador) separados, lo que permite entrenamientos independientes de la tripulación. La entrada en servicio de estos sistemas está prevista para 2022.

Indra, que no  ha facilitado el importe del contrato, asegura que este entrenamiento virtual acelera la preparación del ejército y ahorra costes, al reservar el uso de los vehículos reales para ejercicios de mayor nivel y operaciones reales, reduciendo gastos de mantenimiento y combustible.

"El rápido desarrollo tecnológico de la realidad virtual y las comunicaciones facilitan una inmersión total, que fusiona el empleo de sistemas reales en entornos virtuales", señalan los responsables de simulación de Indra, que añaden que "el uso dual de esta tecnología hace que se esté encontrando todo tipo de aplicaciones más allá de la defensa, como demuestra su empleo en la industria del entretenimiento, sanidad, ingeniería o transporte, entre otros".

Según Indra, el objetivo de este nuevo contrato con la Dirección General de Armamento y Material es que la tripulación del vehículo se entrene como si se encontrase en una misión real, moviéndose en escenarios complejos en los que tiene que coordinarse con otras fuerzas.