Tubacex activa el ERE con 150 despidos y un ERTE para 650 empleados
Las medidas afectan a casi toda su plantilla en España
Tubacex activa su reordenación en España ante la caída de los sectores del petróleo y del gas, que son sus principales clientes y acumulan un retroceso del 50 % desde 2015. Además, la pandemia ha situado en mínimos el nivel de la cartera de pedidos.
La siderúrgica tiene su base industrial en Álava con algo más de 800 empleos. Las medidas de choque afectarán a casi todos. Por un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) con 150 despidos y por un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que afectará a 650 trabajadores.
Las medidas se aplicarán en las plantas de Llodio y Amurrio. Desde el pasado julio, el grupo "ha buscado intensamente alternativas", señalan fuentes de la entidad. Critican la actuación de los sindicatos en las negociaciones, por no respaldar "medidas de ajuste que evitaran despidos". Y desde el fabricante de tubos de acero sin soldadura aclaran que el plan de bajas incentivadas tuvo "un escaso eco".
El grupo y los sindicatos iniciaron ayer un periodo de 30 días para intentar llegar a un acuerdo sobre el ERE y el ERTE propuestos. A mediados del año pasado, Tubacex anunció la puesta en marcha de un plan para reducir un 20 % los costes por la crisis provocada por la Covid-19. El ajuste ya ha concluido en la veintena de plantas que tiene la corporación en el mundo. Y ahora le llega el turno a Llodio y Amurrio. Ambas plantas registraron unas pérdidas de 18 millones en 2020, según comunicó el consejero delegado del grupo, Jesús Esmorís, al Gobierno vasco.