El tsunami de las fusiones arrasa con el mapa bancario
El cliente particular es el que menos interesa ya a los bancos. Su rentabilidad es muy baja, según un banquero
Las fusiones son imparables. Tanto que es difícilmente que un cliente que se haya ido de España durante una temporada pueda reconocer su banco de origen si al final se concretan los res procesos de fusión que se están produciendo, casi simultáneamente. La posible fusión de BBVA y Sabadell se suma a otros casos de concentración financiera, como el anunciado por CaixaBank y Bankia, o el de Unicaja y Liberbank, lo que cambia el mapa bancario español, inmerso en un proceso de reestructuración casi continuo desde la crisis económica de 2008.
Parece como si España quisiera dar ejemplo al resto de los países europeos de disciplina financiera y al toque de corneta todas las entidades se han puesto firmes y han decidido seguir la estrategia marcada por el Banco de España y el Banco Central Europeo.
¿Puede ser bueno?, ¿puede ser malo? Pues la verdad es que no se sabe a ciencia cierta. Es verdad que las fusiones reducen los costes de la entidad resultante, con lo que pasa a ser más eficiente. Es cierto que mejora, inicialmente, su riesgo, que sumar, por regla general una entidad grande, con otra más pequeña, que sin el apoyo de un institución mayor podría pasar algún que otro apuro. Es cierto, que parece que mejoran en capitalización y solvencia, que el mercado aplaude estas operaciones, ¿pero hasta cuando?.
De momento, el problema es que varias zonas rurales verán reducidas sus posibilidades de acudir a una oficina bancaria, que los bancos serán más exigentes a la hora de captar a un cliente, y también a la hora de que no quieran que seas su miembro de su banco.
Las comisiones se han disparado, y van a aumentar más. Y como aseguró ayer un banquero que prefiere mantenerse en el anonimato, “ya no nos interesan los clientes particulares. Ahora nuestro objetivo son las pymes y las empresas. Los clientes particulares ahora dejan un estrecho margen de rentabilidades. Solo ahorran, y al final vamos a tener que generalizar el cobro por los depósitos”, aseguraba. Y como referente tenía al gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, quien el lunes defendió el cobro de los depósitos ante los tipos negativos.
Si finalmente se unen BBVA y Sabadell serían el segundo banco del mercado español por volumen de activos, con casi 600.000 millones de euros, solo por detrás de la posible integración entre CaixaBank y Bankia, que alcanzaría los 665.000 millones, y cuya integración no se produciría hasta el primer trimestre de 2021. Es decir, en solo unos meses, se ha creado un nuevo primer banco y un nuevo segundo banco en España.
Hace solo tres años Santander, con la compra de Banco Popular, escaló a la primera posición en España. Ahora sería el tercero.
Si la fusión de CaixaBank y Bankia concluye con éxito, el nuevo banco será fruto de varios procesos de concentración de 21 antiguas cajas de ahorros. La Caixa –germen de la actual CaixaBank– integró, entre otros, al Banco de Valencia, Banca Cívica, Cajasol, Caja de Burgos y la filial española de Barclays, mientras que Bankia se formó a partir de la unión de Caja Madrid con Bancaja, Sa Nostra, Caja de Ávila o Caixa Laietana.
BBVA y Sabadell también son fruto de varios procesos de concentración. BBVA se creó con la integración del Banco Bilbao con el Banco Vizcaya en 1988 y con Argentaria en 2000, ha integrado desde 2008 a varias cajas catalanas fusionadas previamente en Catalunya Bank (antigua Caixa Catalunya) y Unnim. A su vez, Sabadell adquirió Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM),Banco Guipuzcoano y Banco Gallego.
Santander absorbió en 2017 a Popular. Con anterioridad ya había realizado otras fusiones, como Banco Central Hispano en 1991 y la de Banesto en 1994, entre otras.
Unicaja Banco y Liberbank también son resultado de otras integraciones. Unicaja aglutina el negocio de la antigua Unicaja (nacida en 1991 tras la unión de las cajas de ahorros de Ronda, Cádiz, Almería, Málaga y Antequera) más el del grupo Ceiss, formado por la unión de Caja España y Caja Duero. Liberbank engloba la actividad de Cajastur-Banco CCM, Caja Cantabria y Caja Extremadura. Y parece que sumaremos y seguiremos.