El Corte Inglés vendió online en el primer semestre un 56% más que en todo 2019
Superó los 1.400 millones y supuso el 32% del negocio comercial entre marzo y agosto
La pandemia ha supuesto todo un impulso para el comercio electrónico en España. También para El Corte Inglés, que antes de la aparición del Covid-19 ya estaba en el top 3 de la distribución online, y que ha disparado sus ingresos por esta vía a raíz del confinamiento y de las posteriores limitaciones al comercio físico.
Al cierre del primer semestre de su ejercicio fiscal 2020, transcurrido entre marzo y agosto, El Corte Inglés ya ha facturado a través del canal online un 56% más que en todo 2019, y el triple respecto al mismo periodo del año pasado, según la información financiera que facilitó a inversores este viernes. Un total de 1.437 millones por los 919 del anterior ejercicio completo, y que representan el 32% de los ingresos semestrales del grupo en su actividad comercial, cuando al cierre de 2019 suponían el 7%.
El mayor incremento se produjo entre marzo y mayo, los meses que conforman su primer trimestre fiscal y que coincidieron con el confinamiento severo decretado en España. Durante ese periodo, la venta online creció un 281,6%, hasta llegar a 1.010 millones. Es decir, en tres meses El Corte Inglés ya había superado la facturación online de todo 2019, rompiendo por primera vez la barrera de los 1.000 millones. Esa cantidad representó el 60% de todos sus ingresos de retail en esos tres meses, en los que solo pudo abrir los supermercados de Supercor y los departamentos de alimentación de sus centros comerciales.
En el segundo trimestre, ya con la reapertura de la actividad comercial física, el crecimiento del online siguió siendo alto, del 123% frente a los mismos tres meses de 2019, alcanzando los 426 millones y representando el 15% de los ingresos generados en su actividad de retail.
“El Corte Inglés ha sido durante los meses de confinamiento el líder del comercio online en alimentación y hogar, las dos categorías de productos más demandadas en este periodo; además, se ha situado en el pódium del ecommerce en áreas como moda, electrónica y deportes”, destacó la compañía en una nota de prensa.
La omnicanalidad es una obsesión para los operadores de la distribución clásica y que, obligados por los tiempos, se han metido de lleno en el comercio online. En el caso de El Corte Inglés es la base de la estrategia trazada por su consejero delegado, Víctor del Pozo. Ahí se enmarcan iniciativas como la nueva aplicación móvil, que ha superado las 300.000 descargas; el servicio El Corte Inglés Plus, una tarifa plana de 20 euros anuales para recibir pedidos en dos horas sin gastos de envío y que ya utilizan 100.000 personas; o el plan del grupo de explotar al máximo su capacidad logística, negociando para ello acuerdos con un centenar de marcas, como adelantó este diario el 26 de octubre.
Iniciativas que dejan ver El Corte Inglés del futuro. En el presente,la compañía tiene que lidiar con los efectos de la pandemia, algo minimizados en el segundo trimestre, periodo en el que volvió a registrar un ebitda positivo, en este caso de 64 millones, después de cerrar el primero con uno negativo de 225 millones. El saldo del primer semestre arroja un ebitda negativo de 131 millones, aplicados ajustes de consolidación y los impactos de la normativa contable IFRS 16.
Los ingresos totales entre junio y agosto fueron de 2.817 millones, una caída del 30% frente al mismo periodo del año pasado. La mayor parte de ese ajuste se explica por el batacazo de la agencia de viajes, castigada por la práctica desaparición del turismo. Esta tuvo unas ventas de 64 millones, un 93% menos, registrando un ebitda negativo de 40 millones en un periodo clave como el de la campaña de verano. La actividad comercial que desarrolla a través de sus tiendas, grandes almacenes y negocio online registró una facturación de 2.843 millones, un retroceso del 13% frente, con un ebitda positivo de 48 millones, un 70% inferior al del mismo periodo del año pasado. El negocio asegurador también redujo sus ingresos, un 13%.
Con todo ello, la compañía que preside Marta Álvarez concluyó el primer semestre con una facturación total de 4.489 millones, un 39% menos; con un ebitda negativo de 131 millones, y con un beneficio bruto de 1.285 millones, también un 39% menos. No informó del resultado neto del periodo, algo que sí hizo en el primer trimestre, arrojando unas pérdidas de 510 millones.
La deuda neta a 31 de agosto se sitúa en 3.266 millones, un 17% menos que al cierre del primer trimestre. En esa fecha contaba con una liquidez de 2.192 millones.
“Confianza” ante la campaña clave del año
Navidad. El Corte Inglés mostró en la documentación remitida a inversores su “confianza” en tener un buen desempeño durante las dos próximas campañas comerciales que afronta la compañía, “claves” según su propia definición. Las del Black Friday, en este mismo mes de noviembre, y la de Navidad. También subrayó la resistencia de su estructura financiera a los efectos provocados por la pandemia. “El grupo ha vuelto a resultados positivos en el segundo trimestre pese a la situación actual, y alcanzó niveles de liquidez que aseguran la estabilidad financiera de la compañía”, decía en esa presentación. Algo a lo que hay que añadir la emisión de 600 millones de euros en bonos acometida durante el mes de septiembre.
Futuro. En ese sentido, la compañía de distribución dijo que de cara al futuro “mantiene su política de diversificación de negocios, un permanente impulso a la digitalización y una apuesta decidida por aquellos aspectos relacionados con la responsabilidad social corporativa”.