El Ibex se atasca en los 7.000 y queda a la cola de Europa
El índice español cierra en los 6.943,2 puntos y pierde el 0,67% en la semana
Los mercados han echado el freno de mano y el Ibex 35 ha cerrado una segunda semana de caídas, atascado en los 7.000 puntos. Ha finalizado la sesión en los 6.943,2, con lo que registra un retroceso del 0,8% en la sesión y del 0,67% en los últimos cinco días. La sangría de las tecnológicas en Estados Unidos sigue vigente, ayer con nuevos descensos de calado en el Nasdaq y, aunque la corrección no termina de contagiar al Ibex, ha sido más que suficiente para desanimar a potenciales compradores.
En este contexto lleva el mercado español más de una semana, incapaz de hacerse con los 7.000 puntos pese a múltiples intentos. Así, alterna sesiones en las que los supera con otras en las que los pierde. Ayer el índice español cerró en 6.999,2 puntos y hoy, aunque abrió en 6.989, ha acelerado los descensos a medida que avanzaba la jornada, llegando a bajar más del 1%
Meliá e IAG lideraron los descensos, con caídas del 3,54% y 3,28%, seguidos de los retrocesos de Sabadell y BBVA, del 3,28% y 3,14% respectivamente. En el lado positivo, la farmacéutica Almirall ha liderado los ascensos, con un alza del 4%. El tirón que supuso el viernes anterior la noticia de las negociaciones de fusión entre CaixaBank y Bankia, que animó las cotizaciones del conjunto del sector bancario europeo, no ha tenido prolongación durante esta semana. Es más, Santander y BBVA concluyen la semana con caídas de más del 4%, en parte deshaciendo la subida anterior y en parte también a causa de la nueva incertidumbre que puede suponer una posible operación corporativa.
En el resto de Bolsas europeas domina la cautela y registran subidas muy leves y salvan en positivo la semana. Es el Ibex 35 el peor parado, tanto en el día como en el balance de la semana, en la que se deja el 0,67%. En Estados Unidos, Wall Street arrancó hoy con subidas del orden del 0,4%. Se ha conocido que el índice de precios al consumo en EE UU subió un 0,4% en agosto, después de un incremento del 0,6 % en julio, con lo que la inflación interanual se sitúa en el 1,3%, informó hoy el Departamento de Trabajo. Pero la apertura alcista de Wall Street ha estado sostenida especialmente por Oracle, que ha batido las previsiones en su publicación de resultados, animando de nuevo al sector tecnológico. Ello no evita en cualquier caso que los principales índices estadounidenses se encaminen a su segunda semana de retrocesos.
Al escenario actual se suma la aparente pasividad del BCE, que ayer fue menos proactivo de lo que esperaba el mercado ante la subida del euro. La divisa europea superó los 1,19 dólares durante la sesión de ayer, si bien hoy está en 1,186. Además, en Estados Unidos la pelea partidista impide nuevos planes de estímulo: el Senado rechazó ayer una propuesta republicana con un monto de 300.000 millones, y Donald Trump rechazó ayer dar más plazo a TikTok para vender su negocio en EE UU. Así acaba una semana en la que, además, AstraZeneca interrumpió los ensayos de su vacuna y en la que el Brexit duro parece más cerca.
"Cabe recordar que algunos de los aspectos que se han convertido en el hilo conductor del mercado en los últimos tiempos, como el coronavirus o el Brexit, tampoco ofrecen una imagen que invite especialmente al optimismo, mientras que la guerra comercial y las amenazas de Trump a China aparecen y desaparecen de los medios de comunicación en función de lo que le dicen a Donal Trump los sondeos de la carrera presidencial", señala Aitor Méndez, de IG.
Ninguna noticia pésima, pero tampoco motivos para comprar. Y, de fondo, la corrección de la tecnología, que empaña la visión del mercado. El índice Nyse de 10 gigantes tecnológicos ha perdido un 5,4% entre lunes y jueves en su peor semana desde marzo, pero desde los peores días de la pandemia ha duplicado precios. Es un sector que juega otra partida distinta.
En este contexto, y con las elecciones estadounidenses cerca, el mercado espera más volatilidad. Tampoco el dinero, de hecho, ha huido de la renta variable. El rendimiento de los bonos se ha mantenido relativamente estable durante de la última semana, si bien en la sesión de hoy los tipos a largo bajan tres puntos, tanto en España como en Alemania.
Sí ha habido más presión para el petróleo, que ha caído más del 6% en cuatro jornadas aunque en la sesión de hoy ha logrado recuperar los 40 dólares por barril Brent. La subida de los inventarios de crudo y las dudas sobre la demanda de combustibles hacen temer que este invierno se mantenga el exceso de oferta, pese a las reducciones de producción de la OPEP+.