Viajes, alimentos y hoteles bajan de precio y llevan el IPC al -0,6% en julio
El IPC interanual retrocede tres décimas y encadena cuatro meses en tasas negativas, a pesar de la subida de los carburantes. Los precios de los servicios de telefonía móvil caen un 5,6%
El impacto del coronavirus ha llevado la inflación española a terreno negativo desde el pasado mes de abril. El índice de precios al consumo (IPC) experimentó un descenso interanual del 0,6% en julio, primer dato posterior al estado de alarma, que coincide con el adelantado por el INE hace dos semanas. La tasa negativa, de tres décimas menos que en junio, se debe al efecto de la caída de los precios de los alimentos, de los servicios relacionados con los viajes, la hostelería, o la telefonía, entre otros factores.
Los precios de la hostería (que corresponden a hoteles, cafés y restaurantes) retroceden un 1,1% en julio sobre junio a pesar de coincidir con el arranque de la temporada alta veraniega. Aun así los precios de esta rúbrica todavía están un 0,3% sobre los de 2019. Ese descenso se debe, fundamentalmente, a la fuerte caída de los precios de los hoteles y alojamientos similares, que se abarataron un 18% con respecto al mismo periodo de 2019 para atraer clientes en la pandemia. Por el contrario, el precio de los restaurantes y cafés presentaron una tasa positiva del 1,5%, en línea con meses anteriores.
Asimismo, la pandemia también ha influido en los precios de los vuelos: en comparación con el mismo mes del año pasado, los nacionales presentan una tasa positiva del 1,3%, pero los internacionales una bajada del 8,8%. Estas partidas están en el epígrafe de transportes, que en su conjunto experimenta una variación del -4,5%, cifra siete décimas superior que la de junio, lo que presionó el índice general al alza como consecuencia del encarecimiento de los precios de los carburantes y lubricantes para transporte personal. Asimismo, la escasa demanda de viajeros se ha trasladado al precio de los paquetes de turismo internacional, que se abaratan un 6,3% respecto al año pasado. Este impacto ha provocado que los servicios de ocio y cultura en total hayan experimentado una caída del 1,1% interanual, condicionado también por el descenso mensual del 1,9% del precio de los cines y teatros.
Bienes básicos
Otro segmento que ha tirado a la baja los precios ha sido el de la alimentación y las bebidas no alcohólicas, concretamente por el descenso del precio de la fruta y las verduras. Así, los alimentos bajaron un 0,8% en julio sobre junio, aunque siguen estando un 2,2% por encima del año pasado. Concretamente, las frutas frescas se han abaratado un 5,8% (aunque sobre el año pasado están casi un 10% más caras), las legumbres un 2,7%, las patatas un 2,3% y el aceite un 0,9%.
Por otro lado, los precios de las comunicaciones también contribuyeron al descenso del IPC en julio, sobre todo por los servicios de telefonía móvil (-5,6% interanual). Este segmento experimentó en su conjunto un abaratamiento de los precios de un 1,2% en comparación con el mismo mes de 2019. En términos mensuales, los servicios de telefonía móvil se abaratan un 4% y los paquetes integrados, un 1,6%.
Además, el INE destaca el aumento mensual de los precios de la electricidad (un 2,7% más), que se suma a los experimentados en junio y mayo, que rompieron con tres meses de caídas. En términos interanuales, es un 10,6% más barata que hace un año. Por su parte, el gasóleo para calefacción sube un 8,9% respecto a junio. El INE también subraya la bajada de precio del gas, con una tasa del -4% mensual, tras mantenerse estable en junio, mayo, abril y marzo.
Área sanitaria
Por otro lado, el área sanitaria, muy condicionada por la pandemia, presenta en julio una subida del 0,4% anual. Los servicios hospitalarios aumentaron su precio en un 2% y los ambulatorios en un 1,3%. Además, los seguros sanitarios privados se encarecieron un 4,8%, en línea con las tasas interanuales de los meses anteriores. De otro lado, las residencias de ancianos se encarecen en julio un 2,4% interanual y los servicios de cuidado a domicilio, un 2,2%.
Grupos especiales
Los índices de los grupos especiales de bienes y servicios Covid-19, que durante estos meses han mostrado la evolución de los productos más consumidos por los hogares durante la pandemia (como alimentos o telefonía), se continúan publicando en el mes de julio para permitir analizar la situación tras la finalización del estado de alarma. Así, los precios de los productos del Grupo especial de Bienes registran una tasa anual del 1,8% en julio, cinco décimas menos que el mes anterior. Mientras, la variación anual de los Servicios Covid-19 disminuye también cinco décimas, hasta el -2,9%.
Frente a Europa
La intensidad de la crisis del coronavirus en España ha hecho que los precios se dobleguen respecto a la Unión Monetaria. De hecho, en el mes de julio la tasa de variación anual del IPC armonizado de España se sitúa en el -0,7%, cuatro décimas por debajo de la de junio, mientras la media europea presenta tasa positiva: del 0,4%, una décima más que el mes anterior.
La inflación subyacente en España-que no tiene en cuenta los precios de los alimentos ni los productos energéticos por ser los más volátiles- se situó en julio en el 0,6%, con lo que se establece 1,2 puntos por encima del índice general.