El Tesoro sale al mercado el jueves con el interés del bono a 10 años en nivel prepandemia
Como es habitual, no convocará la subasta programada para finales de agosto
La estrategia de financiación del Tesoro marcha viento en popa. Pilotado por Carlos San Basilio, su secretario general, el organismo ha pisado el acelerador para financiar el déficit español, que se disparará este año hasta situarse en el entorno del 12%.
Este jueves tiene el desafío de lograr más dinero. Pese a que ya es agosto, el organismo de financiación del Estado pondrá en el mercado deuda con vencimientos en abril de 2023, julio de 2027 y octubre de 2030. También venderá obligaciones ligadas a la inflación europea que expirarán en siete años. Espera captar entre un mínimo de 3.750 millones de euros y un máximo de 5.250 millones.Lo hará con el interés del bono a 10 años en niveles prepandemia. El viernes cerró en el 0,34%.
El rendimiento se ha hundido desde el 1,26% que llegó a pagar justo después de que se declarara el estado de alarma. La acción del BCE ha sido decisiva, con su programa de compras de emergencia pandémica.
Como es habitual en los últimos años, el Tesoro no convocará la subasta de deuda a largo plazo de finales de agosto, según anunció el viernes en su página web. En este caso, estaba agendada para el día 20.
San Basilio revisó el programa de emisión a medio y largo plazo el pasado 21 de mayo de 2020, hasta los 185.969 millones, frente a los 117.469 millones iniciales. Pero, en cuanto comenzaron a sonar los tambores de la crisis vírica, el organismo encargado de obtener el dinero para afrontar el gasto público y pagar los vencimientos aceleró, al elevar el importe de las subastas de letras y lanzar varias emisiones sindicadas.
La primera emisión sindicada fue el 24 de marzo, cuando colocó 10.000 millones de euros a siete años con una demanda que multiplicó el importe vendido por 3,6 veces. El precio fue del 0,84%.
La segunda tuvo lugar el 22 de abril, y entonces logró la proeza de vender 15.000 millones de euros, lo nunca visto, a un plazo de 10 años. La demanda rozó los 100.000 millones y la avidez extranjera fue notable. El 9 de junio realizó además una colocación de obligaciones a 20 años que recibió una demanda de 78.000 millones de euros. Colocó 12.000 millones. Esos bonos vencerán en octubre de 2040.
Ya antes de que estallara el Covid, el 14 de enero, logró otros 10.000 millones a 10 años fuera del programa de subastas habituales. Pagará por ellos una rentabilidad del 0,525%.