El PIB de EE UU se desploma un 9,5% en el segundo trimestre
La caída, sin embargo, es menor que la esperada por los analistas
Estados Unidos ha sufrido en el segundo trimestre de 2020 la mayor contracción de la economía desde que existen datos. El PIB del país se ha desplomado un 9,5% trimestral, con especial impacto en el consumo y la inversión, según el dato avanzado que ha publicado este jueves el Departamento de Comercio. En términos interanuales, la economía se contrajo también un 9,5%.
En términos anualizados, el descenso del PIB es de un 32,9%. Esta tasa anualizada parte de la premisa de que el porcentaje de caída del PIB se replique a lo largo de todo un año, es decir, que se mantengan estables a lo largo de cuatro trimestres las condiciones económicas adversas.
El descenso, en todo caso, resulta algo más leve en comparación con las expectativas de los economistas sondeados por Dow Jones, que apuntaban a una bajada del 34,7%. Entidades como Goldman Sachs vaticinaron a finales de marzo que esa caída se situaría en torno al 34% en el segundo trimestre. La contracción anualizada en el primer trimestre fue del 5%, a pesar de que solo registró un par de semanas de restricciones por el coronavirus.
Los causantes del fuerte descenso han venido de la mano del consumo personal, exportaciones, inventarios y gasto estatal y local. Ni siquiera la Gran Depresión de comienzos de la década de 1930 ni la Crisis Financiera de 2008 y 2009 habían causado daños económicos de este calibre en un periodo de tiempo tan concentrado.
De hecho, el peor trimestre en términos de PIB en EE UU durante la pasada crisis financiera arrojó una caída del 1,85%, en el cuarto trimestre de 2008 (8,4% anualizado). El en primer trimestre de 1958, la caída trimestral del producto interior bruto fue del 1,55% (10% anualizado).
La naturaleza de esta crisis, además, se ha debido al factor exógeno del Covid-19, que ha obligado a parar durante semanas la economía mundial, también la de Estados Unidos. La primera potencia económica vio cómo la tasa de paro subía de apenas el 3,5% (la más baja en 50 años) al 14,7% en apenas dos meses por los efectos del confinamiento.