Repsol advierte una recuperación de la demanda y anuncia su plan estratégico para noviembre

Repsol pierde 2.484 millones en el semestre tras dotar 1.658 millones por el Covid-19

El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha asegurado que ya se está notando "una clara" recuperación de la demanda de carburantes de automoción, después de haber suavizando su caída en España al 13% este mes de julio frente al mismo mes del año pasado, tras los desplomes de desplomes de abril y mayo debido al confinamiento por la pandemia de Covid-19.

En una conferencia con analistas para presentar los resultados del primer semestre, que se han saldado con unas pérdidas de 2.484 millones de euros, Imaz subrayó que el último trimestre "ha sido, tal vez, uno de los más difíciles que hemos conocido, no solo en nuestro sector, sino en las sociedades", indicó, tras recordar que la demanda llegó a caer el 68% en abril en el momento más duro de las restricciones y que en mayo fue del 51%. La demanda de queroseno sigue muy por debajo de la del año pasado, con un retroceso en julio del 80%.

La recuperación ya se empezó a ver en junio, con un recorte de los descenso al 25% respecto a mayo, y en julio la caída es del 13%. "Estamos viendo una clara recuperación en la demanda y tenemos que tener en cuenta que en España falta el turista internacional", dijo.

Repsol, que tenía previsto presentar un nuevo plan estratégico el pasado mes de mayo, lo hará en noviembre, con el horizonte a 2025, según ha avanzado su consejero delegado. El objetivo de este plan será lograr emisiones netas cero en 2050 y mejorar la posición de valor global de la compañía.

En este sentido, lmaz, ha reiterado el compromiso de la compañía con la remuneración a sus accionistas, "incluso en el actual entorno marcado por la crisis del Covid-19", y ha asegurado que será "una de las prioridades" en el nuevo plan estratégico y "sin aumentar la deuda". Tras la remuneración de julio que fue satisfecha bajo la fórmula de scrip dividend, la empresa ha cumplido con su compromiso de remuneración al accionista de un euro en 2020.

Respecto a la producción en Libia, que había anunciado que preveían recuperar a mediados de año, finalmente no se producirá antes del cuarto trimestre del ejercicio, según el ejecutivo.

La petrolera prevé contar en 2025 con activos bajos en emisiones de 7.500 MW, para lo que ha anunciado este jueves su entrada en el mercado renovables de Chile con la creación de una sociedad de riesgo compartido con Ibereólica Renovables, que nace con proyectos en el país andino que suman más 1.600 MW de potencia hasta 2025. Repsol cuenta en España con proyectos renovables en diferentes grados de desarrollo que suman 2.300 MW y su presencia internacional se limitaba hasta ahora a su participación en un proyecto de un parque eólico flotante en Portugal de 25 MW.

Cuentas

Repsol cerró el primer semestre con unas pérddas de 2.484 millones de euros frente a los 1.133 millones que ganó un año antes, debido al hundimiento de la demanda de energía (las ventas en las gasolineras cayeron un 48%) y de los precios del crudo y del gas provocado por la pandemia, lo que llevó a la petrolera a ajustar el valor de sus  inventarios y activos de producción en 2.673 millones.

Además, ha aumentado su estimacion inicial de reducción de los gastos operativos hasta los 450 millones, frente a los 350 millones iniciales, y un nuevo recorte estimado de la inversión de 1.000 a 1.100 millones. Mantiene, asimismo, la optimización de capital circulante en casi 800 millones.

En el primer trimestre, la compañía perdió 487 millones, situación que se agravó en el segundo con el avance de la pandemia y la paralización de la economía, con pérdidas de 1.997. Sin esos efectos adversos, según informa Repsol a la CNMV, el resultado neto ajustado, que mide específicamente el desempeño de los negocios, fue de 189 millones de euros,frente a los 1.115 millones que obtuvo en el primer semestre de 2019.

La paralización de la economía y los desplazamientos impactó en las cotizaciones internacionales del crudo y del gas, sobre todo a partir de marzo, en el que la demanda mundial experimentó "el mayor colapso de la historia", señala la compañía. Así, el Brent (crudo de referencia en Europa) registró entre abril y junio un descenso medio interanual del 57%, y el WTI (Estados Unidos) del 53%, con precios medios, en ambos casos, por debajo de los 30 dólares el barril. La caída media del Henry Hub durante el trimestre rondó el 40%.

El desplome de precios impactó en la valoración de los inventarios de Repsol en 1.088 millones de euros, según la petrolera, que ha subrayado que, además, en un ejercicio de prudencia financiera, ha revisado sus hipótesis de precios futuros del crudo y del gas y ajustado a la baja el valor de activos de Upstream (exploración y producción) en 1.585 millones.

En el informe remitido a la CNMV, detalla que el nuevo escenario de precios promedio de Repsol para el período 2020 a 2050, en términos reales de 2020, se sitúa en 59,6 dólares en el caso del Brent y en 3,3 dólares/Mbtu en el del Henry Hub.

En el primer semestre, la cifra de negocios fue de 26.301 millones, con una caída del 33,4%,en tanto que el Ebitda lo hizo un  84,1%, hasta 589 millones. En términos ajustados, la rebaja del ebitda fue del 42,1%, hasta 2.096 millones.

Áreas de negocio

Por actividad, comercial y renovables, ganó 129 millones. El confinamiento y las restricciones a la movilidad impuestas para combatir lacrisis sanitaria, redujeron las ventas en la red de estaciones de servicio en el segundo trimestre un 48%.

El área industrial perdió 802 millones de euros, impactada igualmente por el descenso de la demanda y la paulatina reducción de los márgenes, que conllevó una menor actividad en los complejos industriales. El área de upstream, por su parte, se vio penalizado por la extraordinaria caída de los precios internacionales, que llevaron a unas pérdidas de 1.540 millones hasta junio.

Además, a la vista de la situación del mercado, Repsol decidió disminuir la producción de algunos activos, con lo que la media del semestre se situó en 675.000 barriles equivalentes de petróleo al día, el 3,2 % menos que un año antes. En el segundo semestre, la media fue de 640.000 barriles, en tanto que en el primero había sido de 710.000 y un año antes de 694.000.

"Estamos cumpliendo con los objetivos presentados en nuestro plan de resiliencia 2020. Incluso en un escenario tan desafiante con unos precios de las materias primas deprimidas y con la baja demanda experimentada en el segundo trimestre, Repsol ha sido capaz de obtener un flujo de caja operativo positivo durante el periodo", subrayó Imaz en un comunicado.

El plan de resiliencia de Repsol tiene como objetivo contener la deuda 2020. Así, en el útlimo trimestre ha bajado casi 500 millones, hasta 3.987 millones. Además, subraya, dispone de una "holgada liquidez", de 9.762 millones de euros, que cubre en 2,43 veces los vencimientos a corto plazo.