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Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Una recuperación más lenta retrasa el atractivo bursátil al medio plazo

Pese a ello, la renta variable sigue apareciendo en el radar de los gestores internacionales como la mejor opción para los inversores

CINCO DÍAS

La recuperación de los precios de las acciones desde los mínimos subterráneos marcados tras el severo derrumbe de marzo ha sido muy desigual en el mundo. Mientras en EE UU el Standard & Poor’s ha recuperado la mitad de la pérdida, el Euro Stoxx ha recobrado un 40% de su caída, y la Bolsa española, únicamente un 20%, consecuencia directa de una combinación entre la intensidad de las ayudas monetarias y fiscales en cada zona del planeta y la expectativa de recuperación de la actividad en función de las características de cada economía. Los programas de inyección monetaria en EE UU han sido más generosos que en Europa y han estado acompañados por un programa de distribución directa de renta a la ciudadanía, además del anuncio de un vasto plan de inversiones en infraestructuras viarias que movilizará la inversión pública y privada. Todo ello ha impulsado la valoración de las empresas, que a su vez ha cebado el efecto riqueza en una sociedad que de forma mayoritaria invierte en renta variable.

En el caso europeo, la ayuda monetaria ha sido más limitada, aunque hasta ahora haya resultado suficiente para mantener las primas de riesgo y los tipos del mercado primario y secundario de deuda muy bajos; y los programas de impulso fiscal solo están diseñados, y existen dudas razonables sobre su distribución y sobre la condicionalidad exigida a los países que accedan a ellos. España es prisionera de tales políticas, además de tener una economía muy ligada al turismo y al ocio, una materia en la que se han generado demasiadas dudas y cambios de rumbo y de ritmo sobre las exigencias en las fronteras en un país que ha sido de los más castigados por el Covid-19 y de los más dañados en su imagen externa.

Todo ello explicaría la pereza de los precios de las compañías cotizadas para recuperar el nivel de entusiasmo del resto de los mercados. Pero la renta variable sigue apareciendo en el radar de los gestores internacionales como la mejor opción para los inversores, aunque en este caso con un retardo importante en la recogida de rentabilidades, justo el preciso para la recuperación de las ventas y los beneficios de las empresas. El medio plazo es el horizonte más razonable para diseñar una estrategia de inversión en el mercado español, con una combinación de sociedades cíclicas y otras con negocios más estructurales, como las farmacéuticas, las infraestructuras o las energéticas. Los expertos aconsejan más paciencia, pero también rotar las carteras a empresas con generación continua de caja, nivel manejable de endeudamiento, equipos gestores de contrastada solvencia y recurrencia en la distribución de los dividendos.

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