La industria de semiconductores de EE UU alerta a Trump del impacto del bloqueo a Huawei
Los cambios de regulación de exportación podrían llevar a liderar el mercado a Corea del Sur, a corto plazo, y a China, más adelante, según Boston Consulting Group
La decisión de la Administración de Donald Trump de restringir el acceso de Huawei y otras empresas chinas a semiconductores con tecnología estadounidense podrían poner fin al liderazgo de EE UU en esta industria. Así lo han advertido la Asociación de Industria de Semiconductores (SIA, por sus siglas en inglés) y la consultora Boston Consulting Group.
La primera ha enviado, junto a ocho asociaciones más, una carta a Wilbur Ross, secretario de Estado de Comercio de EE UU, avisándole del impacto que podría tener para esta industria cualquier cambio en los criterios de exportación aplicados a a los fabricantes de semiconductores de EE UU y le insta a que someta a consulta pública cualquier decisión antes de hacerla efectiva.
“Es algo fundamental para garantizar que cualquier regla que se diseñe para lograr la seguridad nacional no tenga consecuencias adversas no intencionadas en la industria estadounidense”. “Los cambios bruscos en las regulaciones crearán incertidumbre para toda la industria tecnológica, pues los semiconductores son la base de la electrónica moderna, de las TI, de la nube, de la industria de defensa. Y desempeñan un papel crítico en muchos sectores, como el de la salud, ahora golpeado por el Covid”, añade la carta.
El informe de Boston Consulting Group resalta igualmente la importancia que tiene este sector para la competitividad económica global de EE UU y asegura que las restricciones a Huawei y otras empress chinas está generando ya importantes vientos en contra de las compañías de chips estadounidenses.
Sus ingresos podrían caer hasta un 37% en los próximos 3-5 años, según Boston Consulting Group
Según la consultora, los fabricantes chinos de dispositivos representaron alrededor del 23% de la demanda mundial de semiconductores en 2018, y la cifra no ha hecho más que crecer, dado el peso que han ido ganando las empresas asiáticas en electrónica de consumo. El informe precisa que las principales empresas de semiconductores de EE UU advirtieron de una caída de ingresos entre el 4% y el 9% tras restringirse la venta de ciertos productos tecnológicos a Huawei en mayo de 2019.
La consultora avisa de que un escenario de mayores restricciones a empresas chinas podría llevar a Corea del Sur a liderar el mercado de los semiconductores en pocos años, y a China en el largo plazo. “Las empresas estadounidenses de semiconductores perderían el círculo virtuoso del que hoy gozan”. “Su participación en el mercado mundial, donde controlan entre el 45% y el 50% del negocio, les permite hoy tener la escala necesaria para financiar inversiones enormes en I+D y avanzar en tecnología para posicionarse por delante de sus rivales globales, pero si se imponen las restricciones apuntadas a las exportaciones, las firmas de EE UU entrarían en una espiral descendente de competitividad”, dicen.
Boston Consulting plantea dos escenarios. En el más benigno, donde EE UU mantendría las restricciones ya vigentes, las compañías de EE UU podrían perder 8 puntos porcentuales de participación global y el 16% de sus ingresos en los próximos 3 a 5 años. Pero, si prohíbe completamente que sus empresas de semiconductores vendan a clientes chinos, podrían perder 18 puntos porcentuales y el 37% de sus ingresos en el mismo plazo.
Estas caídas de ingresos conducirían inevitablemente, según la consultora, a realizar no solo severos recortes en el I+D y gastos de capital, también podría ocasionar la pérdida de entre 15.000 y 40.000 empleos directors y altamente cualificados en la industria de semiconductores de EE UU.
Una industria que también se verá afectada por la política “Made in China 2025”, la cual se prevé eleve la autosuficiencia del país asiático en este tipo de producto de entre un 25% a un 40% para 2025, reduciendo la participación de los semiconductores de EE UU a nivel mundial en entre 2 y 5 puntos porcentuales, tal y como señala el informe citado.
En la actualidad, la industria de semiconductores china (sin incluir las fábricas de estos productos construidas por empresas extranjeras en el país asiático) cubre solo el 14% de su demanda interna.