La griega Ikos retrasa la apertura de un hotel de 150 millones en Málaga
El inmueble, que iba a ser inaugurado en mayo, abrirá sus puertas en septiembre
El coronavirus está obligando a los promotores de hoteles a reprogramar las aperturas que tenían previstas para la primera mitad de este año. La mayoría de inmuebles que tenían previsto echar a rodar en el inicio de la temporada alta han tenido que retrasar la inauguración hasta después de verano.
Es el caso de la griega Ikos, que tenía previsto este mes el estreno de uno de sus proyectos estrellas: la reforma integral del antiguo hotel Costa del Sol Princess (Estepona, Málaga) hasta convertirlo en siete inmuebles diferentes de 411 habitaciones. Un proyecto en el que se han invertido 150 millones de euros, en una obra dirigida por Acciona y Sando. “El confinamiento general y las necesarias medidas restrictivas impuestas en todo el mundo en las últimas semanas, incluyendo la orden de paralización de las obras de construcción en España, nos han llevado a anunciar el retraso de la apertura de Ikos Andalusia hasta el 1 de septiembre de 2020”, recalcó Luis Herault, consejero delegado de Ikos Iberia. La firma griega anuncia que está trabajando en un protocolo estándar estándar de seguridad, limpieza y desinfección aún más exigente “para ofrecerles una estancia segura y cómoda a los primeros clientes que visiten el hotel”.
Ikos pagó 75 millones por el hotel y gasto otros 75 millones en la reforma. El resultado será un complejo hotelero con siete restaurantes (cada uno de ellas ligado a un cocina y dirigido por un cocinero con estrella michelín, con una carta de 330 vinos), ocho piscinas climatizadas, servicio de habitaciones durante las 24 horas del día y un spa con todo incluido. La tarifa media por habitación se situará en el entorno de los 600 euros, un 10% por encima de lo que se cobra en los cuatro establecimientos similares que tiene el grupo en Grecia.
