Los bancos y las corporaciones miman el planeta
Los bonos verdes españoles son una referencia a nivel europeo
El mercado de bonos en 2020 ha arrancado con un volumen récord de emisiones en Europa dominado por los bancos. “Las condiciones del mercado son excepcionalmente favorables, como queda de manifiesto en los altos volúmenes de demanda y cupones mínimos que se han fijado en las emisiones recientes”, destacan en el equipo de JP Morgan.
El negocio americano de deuda vuelve a ser competitivo y de nuevo ofrece a los emisores europeos una oportunidad de financiarse a niveles más económicos que el coste equivalente en euros. Por tanto, es de prever que las compañías españolas vuelvan a recurrir al mercado yanqui, avanzan en JP Morgan.
Los bancos esperan seguir viendo este año un gran desarrollo de los bonos verdes, sociales y sostenibles en todos los sectores. A nivel mundial, el equipo de análisis de BBVA estima que se emitirán alrededor de 320.000 millones de dólares.
En menos de un mes, Red Eléctrica, Telefónica, Bankinter y Adif han colocado ya 2.550 millones de euros en títulos respetuosos con el medio ambiente. Práctica que cobró fuerza el año pasado, cuando los instrumentos de impacto social y ambiental alcanzaron cerca de 255.000 millones de euros a nivel mundial, representando un incremento de cerca del 60%, con claro predominio de emisores europeos y de bonos denominados en euros (más del 40%), según Bloomberg. “Cada año va aumentando el número de emisores y el producto se vuelve sofisticado”, resalta Pablo Lladó, responsable de mercado de capitales de Crédit Agricole.
“Los lanzamientos españoles están a la vanguardia en este aspecto y son una referencia en Europa en implementación de políticas socialmente responsables y de compromisos con el medio ambiente, como en el caso de Santander, Iberdrola, BBVA, CaixaBank, ICO o Telefónica”, resaltan en HSBC.
En 2019 sobresalió el primer bono verde para una teleco a nivel mundial, el green bond inaugural de Telefónica. Una transacción que situó a Telefónica a la vanguardia del sector de telecomunicaciones con una innovadora estrategia dirigida a financiar inversiones en eficiencia energética a través de la sustitución de redes de cobre por otras de fibra óptica.
“Más de un 66% de los inversores que participaron fueron de corte verde, respaldando la estrategia de Telefónica y demostrando el prestigio de la empresa en los mercados de capitales como multinacional socialmente responsable”, puntualiza Pedro Santamaría, director del equipo de bonos de HSBC.
Posteriormente, Verizon y Vodafone siguieron el camino marcado por su competidor español con sendas operaciones, recuerda Reyes Bover, responsable de bonos financieros y de sector público para Europa de BBVA.
ING fue el año pasado el banco estructurador del green financing framework de Red Eléctrica. Durante la primera semana del año, la compañía se ha estrenado en este formato, siendo la primera empresa española en acceder a este segmento. Santander, por su parte, destaca el bono de FCC Medio Ambiente. “La operación tenía el objetivo de mejorar su perfil de crédito (investment grade) y dar mayor confort a los inversores a través de un paquete de fondos destinados al cuidado del planeta”, resalta Antonio García Méndez, su responsable de GDF (global debt finance) para Iberia.
“Las emisiones sostenibles (medioambientales o sociales) han llegado para quedarse, dentro de poco prácticamente todos los emisores estarán emitiendo bonos sostenibles y Crédit Agricole ha apostado muy fuerte en este sector”, pronostica Lladó.