La economía de Estados Unidos crece un 2,3% en 2019
Un menor déficit comercial y la construcción ayudan a evitar un mayor deterioro de la primera economía del mundo
La economía de Estados Unidos creció en 2019 a un ritmo del 2,3%, el dato más bajo desde que Trump asumió la presidencia. El gasto del consumidor estadounidense se moderó y la inversión empresarial continuó deteriorándose a finales del año pasado, mientras que un menor déficit comercial y más construcción de viviendas ayudaron a mantener estable el crecimiento económico.
El producto interno bruto se expandió a una tasa anualizada de 2,1% en el período de octubre a diciembre por segundo trimestre consecutivo, según los datos proporcionados por el Departamento de Comercio estadounidense. El pronóstico medio en una encuesta realizada porBloomberg diferentes economistas preveía un crecimiento del 2%.
El gasto del consumidor se desaceleró a un ritmo de 1,8%, por debajo de las proyecciones y el dato más débil desde el primer trimestre. La inversión empresarial no residencial disminuyó por tercer período consecutivo, el tramo descendente más largo desde la última recesión.
De cara al futuro, los mayores recortes en la inversión empresarial siguen siendo un riesgo si se traducen en salarios más débiles y un gasto del consumidor más moderado. La suspensión de la producción para el 737 Max de Boeing Co., por ejemplo, pesará en la economía al menos durante la primera mitad de este año.
No obstante, la creación de empleo saludable, los costes de endeudamiento baratos y los signos de estabilización en la manufactura global después de los acuerdos comerciales entre EE UU y sus socios comerciales más importantes deberían apoyar a la economía mientras el presidente Donald Trump busca la reelección.
Aun así, el PIB anual creció un 2,3% en 2019, el ritmo más lento de toda la presidencia de Trump y por debajo de su objetivo prometido del 3%. Los economistas esperan que el crecimiento se modere aún más en 2020, ya que los efectos menguantes de los recortes de impuestos y el aumento de las ganancias salariales dificultan el logro de ese objetivo en la etapa tardía del ciclo expansivo más largo de la historia de EE UU.
"El consumidor está empezando a retroceder un poco", ha asegurado a Bloomberg Kevin Cummins, economista senior en NatWest Markets. "Si bien la Fed ha señalado que mantendrá las tasas estables salvo un cambio importante en las perspectivas, una mayor debilidad en la inflación podría impulsar a la Fed a bajar las tasas de interés este año después de tres reducciones en 2019", ha dicho Cummins.