Los noruegos quieren su parte del pastel del fondo del billón de euros
Algunos están solicitando su parte correspondiente, unos 200.000 euros
El fondo gubernamental de las pensiones de Noruega (Statens pensjonsfond Utland, en noruego) ha hecho ricos a los ciudadanos del país nórdico gracias a la explotación de los yacimientos del petróleo. Con los ingresos obtenidos, el Estado creó hace 23 años un vehículo de inversión, que se ha convertido en el mayor fondo soberano del mundo, tanto que ha superado el billón de euros de patrimonio (10,11 billones de coronas noruegas). Es decir, a cada uno de los 5,3 millones de noruegos le corresponden cerca de 200.000 euros.
Esa cifra es la que cada vez más noruegos reclaman para sí. Y es que en las últimas semanas los noruegos han aumentado el número de consultas al fondo sobre si pueden retirar su parte correspondiente. Algunos piden su parte prorrateada, esos 200.000 euros, mientras que otros reclaman tan solo unas monedas para comprar una lata de refresco, según ha publicado Bloomberg. "Es bueno que la gente se involucre y sea consciente de que esto es de todos", aseguró Marthe Skaar, una portavoz de Norges Bank Investment Management.
Ahora bien, algunos noruegos podrían sentirse decepcionados al enterarse de que no podrán hacer sus esperados retiros de dinero. Según Skaar, este podría ser un buen momento para explicar que el fondo beneficiará a las generaciones futuras.
La cota del billón de euros sirvió para que uno de los hasta ahora responsables del fondo, Yngve Slyngstad, consejero delegado de Norges Bank Investment Management (NBIM), la entidad mandatada por el Ministerio de Finanzas noruego para administrar el producto, anunciara su jubilación.
Durante su gestión, el fondo ha logrado una rentabilidad media anual del 8%, algo superior al retorno que ha dado el vehículo desde su gestión, un 5,9% anual. Unas rentabilidades que han logrado que del patrimonio total del fondo, solo un tercio corresponde a los ingresos del petróleo, mientras que dos tercios provienen de la revalorización de las inversiones y de la fortaleza de la corona noruega frente a otras divisas. Es decir, que los gestores han logrado generar riqueza por más de 600.000 millones de euros.