La falta de consenso político podría prorrogar los Presupuestos de Montoro hasta 2021
En el escenario más optimista, las cuentas del próximo año no se aprobarán hasta las puertas del verano
El sudoku político salido de las urnas del pasado domingo y la dificultad de formar un Gobierno con rapidez implicarán el retraso de unos Presupuestos Generales de 2020 que, de haberse regido por un calendario tradicional, se tendrían que haber presentado el pasado mes de septiembre.
Sin embargo, el ejercicio próximo arrancará con las cuentas de 2018 –realizadas por el popular Cristóbal Montoro– prorrogadas nuevamente de forma automática y dejando en el aire elementos clave como la financiación autonómica y el reparto de las entregas a cuenta, la revalorización de las pensiones, la subida salarial de los funcionarios o la actualización del Iprem.
El presidente del Gobierno en funciones ya aseguró hace algunas semanas que se comprometía a revalorizar el salario de los funcionarios en 2020 un 2%, al que se sumaría otro aumento adicional del 0,3% de fondos adicionales y otro 0,55% en función de la evolución del déficit público, según lo acordado con los sindicatos más representativos de la función pública. Sin embargo, Pedro Sánchez dijo que no adoptaría esa medida mientras estuviera en funciones.
De igual forma, el dirigente socialista se comprometió a actualizar las pensiones de 2020 con el IPC real, tal y como ya hizo este año. Es más, aseveró durante la precampaña que aspiraba a blindar su actualización y a subir las pensiones mínimas y no contributivas.
Más allá, la prórroga de los Presupuestos complicaría los planes socialistas de usar unas nuevas cuentas para tocar impuestos ya existentes, como el de sociedades, en el que buscan fijar un tipo mínimo.
De haberse cumplido las estimaciones más optimistas sobre los resultados electorales, se esperaba que la tramitación parlamentaria retrasara a primavera la aprobación de las cuentas de 2019. Sin embargo, estas previsiblemente se verán aplazadas hasta las puertas de verano en el mejor de los casos, aún acudiendo a una tramitación rápida en el Congreso y en el Senado.
De no ejecutarse ese calendario y retrasarse para la vuelta de las vacaciones, ya sería más bien momento de desistir pues es la fecha para iniciar la tramitación de los Presupuestos de 2021.