La insostenibilidad de las pensiones ante la falta de reformas
Es una razón más para urgir a los políticos a desbloquear el Gobierno y tomar medidas
Inmersos en plena campaña política y con unas elecciones que amenazan con un nuevo bloqueo parlamentario, el debate de sobremesa en estas semanas se centra en los problemas estructurales y coyunturales que sufre la economía española y que preocupan a los ciudadanos. Unos problemas que dotan de vulnerabilidad a un economía en desaceleración, y con la amenaza de acentuarse el decremento en los próximos años, de acuerdo con el Banco de España.
Entre los temas más tratados en el debate político y por el fuerte caudal de votos que representan, ha sido el tema de las pensiones. Unas pensiones que se encuentran bajo la amenaza de supervivencia tras la nueva lectura del déficit, que eleva la deuda pública al 99% sobre el PIB. Una deuda que marca nuevos máximos, en un momento, además, donde las pensiones lideran el encarecimiento del gasto público tras la incapacidad de afrontar las revalorizaciones.
Las pensiones son un gran gasto para el país. El nivel de déficit ya supera los 26.000 millones de euros, lo que equivale al 2,14% del PIB del país. Un déficit registrado por varios incrementos de gasto, entre los que destaca el pago de unas pensiones que, a fecha de septiembre de este año, suponían un desembolso superior a los 9.600 millones de euros. Un aumento del 4,9% respecto al mismo mes del año anterior, y que pone de manifiesto el crecimiento del gasto, en descompensación con los ingresos por las cotizaciones sociales.
Las pensiones, dada la cantidad de pensionistas que posee el país, son un tema decisivo en el debate político. Tal es el nivel de decisión, que el 25% del voto depende de los propios pensionistas; razón por la que los partidos políticos, a lo largo de nuestra reciente historia democrática, no han efectuado grandes reformas desde el famoso Pacto de Toledo. Unas reformas que, sin embargo, son necesarias si queremos sufragar este coste en el futuro.
La pirámide poblacional invertida, la baja natalidad, los altos niveles de desempleo o los elevados niveles de deuda, en un entorno de débil crecimiento económico, amenazan con el incumplimiento en los pagos de estas pensiones. La insostenibilidad es una realidad, con una población cada vez más desempleada, envejecida, con menos hijos y más endeudada. Una realidad que, pese a negarla de forma pública, en el largo plazo será imposible de esconder.
Una razón más para urgir a los políticos a desbloquear el Gobierno y adoptar medidas, pues ante una tasa de dependencia que tiende a la paridad a la mitad del siglo –de acuerdo con BBVA Research–, sostener las pensiones en un futuro no muy lejano va a ser, como diría aquel, una tarea más que imposible.
Francisco Coll Morales es director adjunto de HAC L&M School of New York