El conglomerado Cemex España perdió 800 millones en 2018
Eleva su base imponible negativa a 7.000 millones, el 36% en el mercado local
El grupo de sociedades de múltiples países que conviven bajo el paraguas de Cémex España volvió a cerrar un ejercicio, en este caso el de 2018, con abultadas pérdidas. La entidad, que agrupa negocios del conglomerado cementero mexicano en lugares tan dispares como España, Suiza, Hungría, Letonia, Jamaica, Filipinas, Egipto o Australia, obtuvo 808 millones en rojo, empeorando desde los 118 millones con signo negativo de 2017.
Cémex España y sus sociedades mejoraron un 1,2% los ingresos, hasta los 9.343 millones. El resultado de explotación, por su parte, concluyó el año con pérdidas por 411 millones (196 millones en rojo en 2017) por mayores costes de aprovisionamiento, especialmente de las materias primas y energía.
Solo un 3,2% de la cifra de negocio consolidada depende de España, con 299 millones tras un alza del 8,1%. Además de este incremento en la actividad, el grupo también elevó sus ingresos en EE UU, Polonia o Egipto, mientras bajó sus cifras en Panamá, Reino Unido y Colombia. El flujo de caja, de 1.061 millones se desplomó un 26%.
Este desempeño lastra las cuentas del que es uno de los cinco grandes jugadores mundiales del cemento, la mexicana Cémex, cuyos beneficios el año pasado ascendieron a 496 millones de euros.
Cemex España y sus dependientes amasan bases imponibles negativas por algo más de 7.000 millones de euros, de los que 2.535 millones se refieren a la actividad en España desde 2003, a compensar contra eventuales beneficios fiscales futuros. Los otros 4.514 millones, pendientes de compensar, proceden de distintas firmas dependientes esencialmente de Reino Unido, Alemania, Suiza y Luxemburgo. La compañía explica que el plazo de aplicación de estas bases imponibles negativas en el exterior depende de la legislación fiscal de cada uno de los países. En España, la base imponible negativa puede ser compensada sin límite temporal, según dicta la Ley del Impuesto sobre Sociedades, y la Agencia Tributaria tiene diez años para investigar las bases pendientes de compensar.
Venta de activos
Cemex España recuerda en su balance del pasado 2018 que se encuentra inmersa en un ejercicio de desinversiones para atender los costes operativos y tratar de reducir el endeudamiento. Entre esas operaciones de adelgazamiento resalta la venta de la fábrica de cemento blanco de Buñol (Valencia) por 180 millones de dólares a Cimsa Cimento.
En la tarea de adaptar la filial local Cemex España Operaciones al volumen del mercado de la obra civil y residencial, se apunta el cierre del pasado mes de enero de las plantas de Gador (Almería) y Lloseta (Baleares), así como el despido colectivo de sus plantillas. Cemex también viene de presentar garantías por 316 millones de euros, entre un seguro de caución e hipotecas sobre activos fijos (terrenos e inmuebles), para la activación de las medidas cautelares dictadas por la Audiencia Nacional para la paralización de una histórica multa. La Agencia Tributaria impuso sanciones por 456 millones a la empresa ante las declaraciones del Impuesto sobre Sociedades de los ejercicios fiscales que van de 2006 a 2009.
Costes de explotación
El peso de la factura energética. Algo más de la mitad de los ingresos de Cemex España se van en aprovisionamientos, con una factura de 4.220 millones principalmente en materias primas y energía.
Miles de empleados dependientes de filiales españolas. Una partida de 1.500 millones sufraga los costes de personal. La voluminosa plantilla, de casi 28.300 trabajadores, depende casi en su totalidad de filiales españolas desde 2016.