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Francia se une a Alemania, Austria y Holanda en las críticas a Draghi por las compras de deuda

El gobernador del Banco de Francia, François Villeroy, afirma que "son innecesarias ahora mismo"

El gobernador del Banco de Francia, Francois Villeroy de Galhau
El gobernador del Banco de Francia, Francois Villeroy de GalhauReuters

El banco central de Francia se ha sumado a las críticas ya expresadas por sus homólogos de Alemania, Austria y Países Bajos sobre la necesidad y el alcance del paquete de estímulos aprobado por el Banco Central Europeo (BCE) hace dos semanas.

"No estoy a favor de reanudar las compras netas de activos esta vez porque pienso que son innecesarias ahora mismo, dados los bajos niveles de los intereses a largo plazo y las primas de riesgo", ha explicado el gobernador del Banco de Francia, François Villeroy, durante un discurso pronunciado este martes en París y recogido por 'Reuters'.

Sin embargo, el banquero central también ha asegurado que estaba a favor de las otras medidas que se incluyeron en el paquete, que incluyen la rebaja en el tipo de facilidad de depósito, el compromiso de mantener los tipos bajos por un tiempo prolongado y facilidades para los bancos, como la segmentación de la tasa de depósito o el cambio en las condiciones del tercer programa de operaciones de financiación a largo plazo con objetivo específico (TLTRO-III).

Hace dos semanas, el presidente del banco central de Alemania (Bundesbank), Jens Weidmann, afirmó que la autoridad presidida por Mario Draghi fue más allá de sus objetivos y que un paquete con tantos estímulos "no era necesario".

De su lado, el presidente del banco central de Austria (Oesterreichische Nationalbank), Robert Holzmann, opinó que las nuevas medidas anunciadas eran un "error", mientras que su homólogo holandés, Klaas Knot, calificó el paquete de "desproporcionado".

Pese a las críticas, este lunes Draghi defendió en una comparecencia en el Parlamento Europeo que la ralentización de la economía hacía "indispensable" aprobar los estímulos.

"Cuando el Consejo de Gobierno se reunió hace dos semanas, se enfrentó a una desaceleración más rápida y extensa que lo pensado anteriormente, riesgos a la baja más persistentes y un nuevo retraso en la convergencia de la inflación hasta nuestro objetivo. Una respuesta fuerte de la política monetaria era, por tanto, indispensable", expresó en su última audiencia ante la comisión de Asuntos Económicos y Monetarios de la Eurocámara.

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