La banca vuelve al ‘via crucis’ bursátil: pierde un 15% en dos meses
Las prolongación de la política de tipos cero deteriora sus perspectivas de ingresos
La banca española no levanta cabeza. En los últimos dos meses, las entidades financieras que operan fundamentalmente en España (CaixaBank, Bankia, Bankinter, Banco Sabadell...) han perdido de media un 15% de su valor. La certeza de que el Banco Central Europeo (BCE) va a prolongar más de lo esperado su política de tipos ha hecho que se revisen las previsiones de márgenes futuros, lo que ha acabado repercutiendo en el precio de la acción.
Entre las dos entidades financieras más castigadas durante el verano están Bankia (la peor del Ibex 35 en este periodo, al ceder más de un 20%) y CaixaBank, que se ha dejado algo más del 18%.
Los dos gigantes bancarios españoles también han sufrido. Santander ha perdido en julio y agosto cerca de un 16% (y cotiza por debajo de los 3,5 euros por acción), y BBVA se ha dejado más de un 12%. Ponderándolos por su tamaño, la banca española del Ibex 35 se ha dejado algo más del 12% en solo dos meses.
"Las paupérrimas perspectivas de negocio que atraviesan las entidades financieras se deteriorarán si el Banco Central Europeo (BCE) dar un nuevo giro de tuerca a sus políticas monetarias en los próximos meses", apunta Aitor Méndez, analista de la firma IG.
A su juicio, esta situación podría incluso empeorar cuando, a la vuelta del verano, los bancos de inversión revisen a la baja los precios objetivos que tienen puestos para los bancos españoles.
Algunos fondos que habían apostado con fuerza por el sector bancario español han sufrido en estos meses. Es el caso de Okavango Delta, de Abante Asesores, que se deja ya un 12% en lo que va de 2019.
También han tenido un mal comportamiento durante los meses de verano las compañías más vinculadas al ciclo económico. El deterioro de las perspectivas de crecimiento de la economía mundial y el empeoramiento de las cifras de comercio internacional han afectado a su cotización.
Este es el caso de ArcelorMittal, que pierde más del 16,8% en los dos últimos meses, o de CIE Automotive (-16,2%), lastrada por el cambio de perspectivas sobre la industria automovilística.
Aunque el Ibex 35 ha tenido un mal desempeño estival, hay ocho compañías que han terminado en positivo. Entre ellas destacan algunas eléctricas, como Iberdrola (+9,1%) o Endesa (+3,4%). Los inversores han apostado por este tipo de valores más defensivos, por su capacidad de generación de ingresos recurrentes y su generosa política de dividendos. Con el pronóstico de un alargamiento de la era de los tipos cero, cada vez son más los inversores que buscan refugio en este tipo de compañías.
Pese a todo, el grupo empresarial que ha obtenido un mejor resultado durante los meses de julio y agosto destaca Ferrovial, con una revalorización que roza el 15%. Los analistas consideran que la firma podría beneficiarse de los planes de la Administración estadounidense para invertir en infraestructuras. Este factor estaría también detrás de la subida.
La segunda firma que más ha subido es Cellnex (+12,1)%. Los inversores valoran muy positivamente la estrategia de crecimiento del operador de infraestructuras de telecomunicaciones. Las recientes compras en Francia, Italia y Suiza le permitirán duplicar su tamaño y consolidar su posición dominante en el sector en Europa. Algunos analistas subrayan que Cellnex va a sacar provecho del desarrollo de la tecnología 5G.
También se han revalorizado Grifols (+10,8%), Inditex (+6,3%).
En el resto de Bolsas europeas, los bancos también han sufrido. Las grandes entidades financieras del Viejo Continente han perdido un 8,5% en estos dos meses, con algunos bancos irlandeses y portugueses anotándose caídas de entorno del 30%.
Solo ha habido una industria con peor desempeño durante el verano: la de las materias primas. El temor a una desaceleración mundial ha afectado mucho a compañías mineras. Gigantes como Glencore, BHP o Rio Tinto se han dejado alrededor del 12%.