Baterías más pequeñas en coches más caros. La nueva jugada de Tesla
Tesla cambia su estrategia a la hora de equipar las baterías de sus coches
Tesla realiza constantemente revisiones de sus coches eléctricos para adaptarse a los ritmos de producción. La compañía de Elon Musk está buscando nuevas fórmulas para encontrar el equilibro entre democratizar la tecnología de sus coches eléctricos y que estos no pierdan un ápice de sofisticación. Al parecer, este objetivo pasaría por ofrecer vehículos más equipados y con opciones de personalización que ayudan a maximizar las ventas y potenciando las ventas de coches con baterías más pequeñas.
La pregunta en este momento es saber cómo Tesla va a conseguir vender vehículos de mayor coste con baterías más pequeñas. El elemento clave en un vehículo eléctrico y en el que se deben dar muestras de avance, es precisamente en su autonomía. Por tanto, ¿cómo van a lograrlo?.
Tras resolver aparentemente sus problemas financieros, la compañía estaría produciendo actualmente unas 6.000 unidades del Testa Model 3 por semana, llegando a fabricar ya más de 250.000 unidades de dicho modelo.
¿Por qué Tesla Apuesta ahora por baterías más pequeñas?
Elon Musk ha afirmado que su cadena de producción es más efectiva fabricando versiones de autonomía estándar. Tesla es capaz de producir 1/3 más de coches con este tipo de baterías que con las de gran autonomía. De esta forma, el cuello de botella actual en la fabricación de baterías, se vería en cierta forma aliviado. Sin
embargo, la compañía debe dar con la clave que justifique el lanzamiento de modelos con menor autonomía, como la versión “autonomía estándar plus” del Tesla Model 3 que se comercializa en España, y cuyo precio parte de los 48.200 euros. Este es el modelo que Tesla visualiza como rentable, aunque cuenten con un 50% menos de
almacenamiento energético.
Lo que Tesla no ha dejado claro es de qué manera potenciarán las ventas de estas versiones con baterías estándar ni si ofrecerán nuevas versiones con este tipo de batería. Puede que la estrategia pase en gran parte por muchas de las tecnologías opcionales que el cliente puede implantar en su vehículo. Recordemos que solo el Autopilot, es decir, la conducción autónoma del Tesla Model 3, y uno de sus extras más atractivos, tiene un coste cercano a los 6.500 euros.
Precisamente este componente pude suponer pronto un nuevo quebradero de cabeza en la situación financiera de Tesla, ya que parte de sus elementos electrónicos se fabrican en China. Recientemente, Donald Trump advirtió que el próximo viernes elevará del 10% al 25% los aranceles que aplica a productos chinos importados, justo después de que la exención solicitada por Tesla a dichos aranceles fuera denegada.
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