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Tribuna
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¿Por qué, en general, siempre coinciden las vacaciones con la subida del precio de la gasolina?

Un estudio reciente de la OCU afirma que poder elegir gasolinera permite ahorrar entre unos 220 y 330 euros al año

¿Por qué, en general, siempre coinciden las vacaciones con la subida del precio de la gasolina? Llegan las vacaciones de Semana Santa y ya tenemos claro dónde pasarlas. Sin embargo, el boletín de petróleo de la Unión Europea avisa de que los precios del carburante aumentarán considerablemente, haciendo que el viaje por carretera sea más costoso si no lo planificamos bien.

Es curioso que los precios del carburante suban coincidiendo con las vacaciones. Hay varios factores que influyen en este hecho y de diversa índole. Algunos se pueden controlar, otros no dependen de nosotros. De estos últimos se trata del precio del barril de Brent, el traslado del producto o los impuestos, que poco podemos hacer.

Pero siempre podemos apretar los factores que dependan de las gasolineras. Hay que recordar que este sector está sujeto, como el resto, a la ley de la oferta y la demanda, es decir, que cuando se prevé un aumento de compradores, aumenta el precio del producto motivado por el interés. Por eso no es lo mismo repostar un miércoles, que hacerlo un viernes o un sábado. Y por eso no es lo mismo, repostar una semana antes que la misma semana de vacaciones.

Otro de los factores que influye en el precio es la falta de libertad de compra a los proveedores. El tercer motivo es la falta de planificación del viaje. Es decir, parar a repostar en gasolineras de la propia autovía. No son las mismas gasolineras las que se encuentran dentro del perímetro de las áreas urbanas que las de las carreteras. Tienen ventajas competitivas distintas o diferentes precios. Y para terminar con los factores, no podemos olvidar, quizá el más importante: la competencia. Cuanto más, menos. Es decir, que cuantas más gasolineras haya, más barato será el carburante. 

Un estudio reciente de la OCU afirma que poder elegir gasolinera permite ahorrar entre unos 220 y 330 euros al año en función de la zona donde vivamos. Las gasolineras de la carretera nos las encontramos siendo una tómbola el precio, por eso es mejor acudir a repostar antes de salir de viaje, porque sabemos cuál es el precio, dónde está la más barata y cuánto nos ahorramos. El precio del carburante durante una época vacacional suele aumentar, pero podemos evitar que nos afecte si planificamos bien el viaje y sabemos utilizar la tecnología.

David Querejeta es socio y director de expansión de Ballenoil

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