Guillaume Faury, horas de vuelo para poner orden en Airbus
El nuevo CEO afrontará los recortes de empleos por el fin de los jumbos
Airbus se prepara para un nuevo despegue. Guillaume Faury, (Cherburgo, Francia, 1968) se convertirá en el sustituto de Thomas Enders y nuevo CEO de la compañía el próximo 10 de abril y dejará su puesto de presidente del negocio comercial de la empresa. Faury lleva en este último cargo desde febrero de 2018. Allí ha trabajado en la mejora del sistema de fabricación de la unidad comercial de Airbus y ha estado llevando el negocio a una era en la que la tecnología digital está transformándolo todo, desde cómo se diseñan y fabrican los aviones hasta el vuelo y el mantenimiento.
Nacido en Cherburgo, una ciudad costera situada en Normandía de apenas 35.000 habitantes, Faury terminó ingeniería en la Escuela Politécnica de París en 1990, una universidad plagada de estrellas. Por sus aulas han pasado premios Nobel de Economía como Jean Tirole o Maurice Allais, así como el Nobel de física Henri Becquerel. También directivos de empresa como los CEO de Renault, Air France KLM y Arcelor –Georges Besse, Alexandre de Juniac o Guy Dollé, respectivamente– estudiaron en la prestigiosa universidad parisina.
Después de la universidad, Faury se especializó en aeronáutica en la Escuela Nacional Superior de Aeronáutica y del Espacio de Toulouse. Tras varios años de trabajo como ingeniero de pruebas de vuelo en la Dirección General de Armamento, comenzó a interesarse por el mundo de la empresa y estudió un Máster en Dirección de Empresas en Aix-Marselle Graduate School of Management de 1998 a 2000. Más tarde ocupó varios puestos de liderazgo en ingeniería y programas y pruebas de vuelo en el negocio de helicópteros de Airbus, que en ese momento operaba bajo el nombre de Eurocopter. Se convirtió en vicepresidente ejecutivo de programas y fue miembro del Comité Ejecutivo de Eurocopter antes de ser nombrado Director Ejecutivo de Investigación y Desarrollo.
En 2009 cambió las alas por ruedas tras dar el salto a la industria automovilística con Peugeot (ahora Grupo PSA), donde llegó a ser vicepresidente ejecutivo de investigación y desarrollo y miembro del consejo de administración de la empresa. Dirigió avances significativos en la tecnología de motores híbridos de bajas emisiones de la empresa.
En 2013 volvió a Airbus como presidente y director general del área de helicópteros. Su labor principal fue la reestructuración de su sistema introduciendo cambios de tecnología en sus fábricas. Llegó a acuerdos tanto en el mercado civil como en el de defensa para aumentar las ventas de la compañía durante los peores momentos de la crisis.
Como presidente de Airbus Helicopters, dirigió el diseño y desarrollo del helicóptero de medio alcance H160, que abrirá nuevos caminos en eficiencia de combustible, tecnología de piloto automático y comodidad de los pasajeros cuando entre en servicio en 2020, según ha asegurado la compañía. También supervisó el lanzamiento en 2015 del CityAirbus, una innovación en el transporte aéreo urbano y la tecnología de propulsión eléctrica. Es un vehículo de batería para cuatro pasajeros que podrá despegar y aterrizar verticalmente. El objetivo es implantarlo en viajes cortos y en ciudades con mucho tráfico.
Se dice de los normandos que son de trato afable, cálido y hospitalario. Faury es también ordenado y metódico, características imprescindibles para la gestión y alta dirección. Además, el nuevo CEO de Airbus está interesado en el mundo de la aeronáutica desde su infancia. Actualmente es piloto de aeronaves y tiene 1.300 horas de vuelo. Trabajará desde la sede de Airbus en París a partir de su nombramiento como CEO de la empresa, ciudad donde vive con su mujer y sus tres hijos.
El nuevo primer ejecutivo de Airbus se estrena con un horizonte conflictivo tras la decisión de dejar de fabricar el Airbus 380 en 2021. “No disponemos de una cartera de pedidos del A380 sustancial y, por tanto, no hay una base que sustente la producción de este avión, a pesar de todos los esfuerzos de venta que hemos realizado con otras aerolíneas en los últimos años”, dijo el aún CEO Tom Enders hace apenas dos semanas. La compañía ha estimado que la decisión podría afectar a entre 3.000 y 3.500 trabajadores. En España, los sindicatos calculan que podrían peligrar hasta 250 empleos, ya que las plantas de Getafe, (Madrid) Illescas, (Toledo) y Puerto Real, (Cádiz) se encargan de ensamblar partes de este avión gigante.
Otro problema latente podría materializarse en Reino Unido si hay un Brexit sin acuerdo. Enders ha confirmado que las fábricas que tiene Airbus en el país no pueden trasladarse inmediatamente, ya que el sector aeroespacial es un negocio de plazos largos, aunque “puede verse forzado a redirigir inversiones futuras”.
Guillaume Faury llega a la cúpula de Airbus comprometido con el medio ambiente. Quiere mejorar el rendimiento reduciendo las emisiones en todas las operaciones comerciales, aumentando la eficiencia de combustible de sus aviones y, a largo plazo, diseñando una nueva generación de aviones de pasajeros más limpios.
IAG sustituye sus aeronaves
Boeings 777-9. British Airways, una de las compañías del holding IAG anunció esta semana que se decantan por el Boeing 777-9 para sustituir a los 34 Boeing 747 que jubilará a comienzos de 2024. Esta decisión supone un revés para el fabricante europeo Airbus.
La flota de British Airways conformada por Airbus. No obstante, la mayoría de aviones de BA son Airbus, con 166 aeronaves. De ellas, 148 ya forman parte de la flota perteneciendo a la familia del A320 (318, 319, 329 y 321) más doce A380.